Los Warriors regresan a la victoria con el mejor Cousins

La semana pasada aparecieron unos datos que ponían en duda la aportación de DeMarcus Cousins a los buenos resultados de los Golden State Warriors. Con él en pista se resentía sobre manera el +/- del equipo. Esta noche en Charlotte el pívot contestó a esos números con su mejor juego. Si además estuvo acompañado por el resto de titulares, el partido difícilmente se le iba a escapar a los Warriors.

Ya desde el final del primer cuarto se pusieron en ventaja y no la abandonaron más, aunque los Hornets no perdieron su oportunidad de ganar hasta los últimos 12 minutos. Un triple surrealista de Curry, que tiró sin colocarse y después de controlar mal el balón, cerraba el encuentro. El base fue el menos destacado de los suyos (16+5+6+4 con malos porcentajes de tiro) pero le dio para dejar varias acciones de calidad.

Durant (20+7+4) fue el primero en ponerse las pilas, cerrando el primer periodo con un fantástico triple con stepback y demostrando un juego de manos espectacular. Pero quienes realmente brillaron fueron los otros tres. Como ya comentaba, Cousins fue un martillo durante todo el encuentro y firmó un doble-doble (24+11, con 3 asistencias y 3 tapones). También Draymond Green (14+8+10 y 3 tapones) y Klay Thompson (26+2+5 y el mejor +/- del equipo) hicieron un partido muy completo. En ese sentido no hay que olvidarse de Iguodala (+14 en 24 minutos) y de Livingston (+13 en 14), claves ambos desde el banquillo.

En los Hornets los mejores fueron Kody Zeller y Kemba Walker. Este último jugó 40 minutos a pesar de dar el susto al final del primer cuarto, cuando se marchó al vestuario después de una torcedura de tobillo muy fea. El base acabó con 23 puntos, 3 rebotes y 6 asistencias. Por su parte, el pívot firmó 28 puntos, 9 rebotes, 2 asistencias, 3 robos y 3 tapones y junto a Walker fueron quienes mantuvieron a los locales en el encuentro.