NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

NBA | THUNDER 98 - WIZARDS 116

Sorpresón de los Wizards, que ganan fuera y a los Thunder

Uno de los peores equipos en la carretera asaltó una de las canchas más difíciles de la NBA. Sentenciaron  Beal, Porter Jr. y Green en el último cuarto.

Actualizado a
Jan 6, 2019; Oklahoma City, OK, USA; Washington Wizards guard Bradley Beal (3) drives to the basket around Oklahoma City Thunder guard Dennis Schroder (17) during the first half at Chesapeake Energy Arena. Mandatory Credit: Alonzo Adams-USA TODAY Sports
Alonzo AdamsUSA TODAY Sports

Aunque los Wizards habían mostrado síntomas de mejoría en los últimos tres partidos partidos (dos victorias y derrota peleada en Miami), nada hacía suponer el desenlace que se vivió en Oklahoma. Los Thunder, uno de los equipos más compactos y serios de la temporada, con una defensa de élite y un Paul George jugando su mejor baloncesto, desaparecieron casi por completo desde los últimos minutos del tercer cuarto, desbordados por los de Washington.

Hasta entonces el partido había transcurrido en la igualdad más absoluta. Pero un parcial de -14 para los locales en la segunda mitad, concentrado especialmente en los últimos 15 minutos, echó por tierra todas sus opciones. Recordaron a aquellos Thunder perdidos de los cuatro primeros partidos, una imagen que parecía olvidada. Sin duda se trata de un accidente. Westbrook, eso sí, acabó con su clásico triple-doble (22+15+13, con 8 pérdidas). Aunque el gran problema individual estuvo en sus otras dos estrellas, las que este año están jugando mejor que nunca. Paul George (20+4+5+2) y Steven Adams (12+8) rindieron por debajo de su nivel habitual.

En lo Wizards fue un buen partido en líneas generales, pero hay que destacar a tres de sus jugadores exteriores. Bradley Beal (25+5+6+2), Otto Porter Jr. (20+6+5 y 3 tapones, 4/6 en triples) y Jeff Green (16+6+2) fueron los que de verdad reventaron el partido en esos minutos de desequilibrio. Con un acierto tremendo impidieron cualquier tipo de reacción al equipo local. Lo malo para ellos es que esta mini reacción aún les deja lejos de playoffs (a tres partidos y medio) y que el calendario no les va a ayudar: back-to-back con los Sixers, primero en Philadelphia, para después recibir a los Bucks y los Raptors. La aristocracia del Este poniéndoles a prueba cuando parecen querer levantar la cabeza.