La reunión del martes celebrada en Los Ángeles entre Jimmy Butler y Tom Thibodeau ha puesto patas arriba a los Timberwolves y podría acabar desatando un terremoto en la NBA a menos de un mes para el inicio de la regular season. Recapitulemos. Butler, que será agente libre el próximo verano (siempre y cuando ejerza su opción de jugador, lo que será así), ha solicitado salir traspasado de una franquicia a la que llegó hace apenas un año. La falta de química entre el ex de los Bulls y las dos jóvenes estrellas que estaban ya en Minnesota (Andrew Wiggins y Karl-Anthony Towns) es evidente, tal y como hemos podido ir comprobando a lo largo del verano. 

Thibodeau, quien la pasada temporada logró acabar con una sequía de 14 años sin disputar los playoffs, confiaba que estos problemas se solucionaran con una reunión una vez diese comienzo la pretemporada la próxima semana. Sin embargo, la patata caliente le ha estallado en las narices y, sobre todo, a través de un hombre de su máxima confianza como es (o era) Butler. Un jugador al que moldeó en los Bulls hasta convertirle en una estrella de la Liga y por el que en junio del pasado verano dio a dos jóvenes promesas como Zach LaVine y Kris Dunn y el número 7 del draft 2017 —a cambio del 16— que en Chicago canjearon por un Lauri Markkanen que causó una excelente impresión en su año rookie. En otras palabras, Thibodeau —también presidente de la franquicia— se hipotecó por un Butler al que, para hacer que se sintiese cómodo y a gusto, ha ido reuniendo a lo largo de la pasada campaña y en este mercado con antiguos compañeros como Taj Gibson, Derrick Rose y Luol Deng.

El momento de Towns... y de Wiggins

Una apuesta fallida que, evidentemente, deja a Thibs y a Scott Layden (general manager) aún más en entredicho. Pero, más allá de perder a Butler, su salida puede no resultar tan traumática. Me explico. El vestuario, de continuar como hasta ahora, iba a convertirse en un polvorín imposible de reconducir. Todo, con Karl-Anthony Towns aún sin firmar la ampliación de su contrato rookie. La resolución del caso Butler, el motivo que el ala-pívot había puesto para posponer la firma, dejan ahora sí y como debe ser el futuro de Minnesota y el nuevo proyecto en sus manos. También en las de un Wiggins que no oculta su felicidad —tampoco su hermano— por este nuevo rumbo, pero al que el crédito comienza a agotársele.

Volvamos a Jimmy Butler. Él quiere salir y para conseguir su deseo y facilitar las cosas a los Wolves ha puesto sobre el tapete su as en la manga: una lista de tres equipos con los que acabaría firmando el próximo verano una renovación que podría alcanzar un máximo de 190 millones de dólares y cinco años. Esto significa que a la hora de negociar su traspaso con uno de estos tres equipos, los Timberwolves tendrían algo más de fuerza (de cara a obtener más y/o mejores jugadores o picks) al intercambiar a una estrella que en vez de quedar libre en julio de 2018, se comprometería a largo plazo con su nueva franquicia... siempre y cuando esta forme parte de su lista de deseos.

Los Clippers, favoritos para hacerse con Butler y Kawhi

Y aquí es donde aparecen los Clippers. Tal y como anunciaba Adrian Wojnarowski (ESPN) esta misma madrugada, la franquicia angelina es la que más interés despierta en Jimmy. Al jugador le atrae mucho la flexibilidad ecónomica con la que cuentan en la Lob City de cara a la próxima agencia libre, en la que podrían acoger dos contratos máximos. El suyo y el de otra estrella, que bien podría ser un Kawhi Leonard cuyo deseo, siempre y cuando no acabe quedándose en Toronto (los Raptors tienen un año para hacerle cambiar de opinión), es irse a jugar Los Ángeles, su ciudad natal. Las dudas de Kawhi sobre irse a los Lakers, el equipo de LeBron, colocan al otro equipo de LA en una situación inmejorable. Tanto que según Wojnarowski son a día de hoy los grandes favoritos para hacerse con el MVP de las Finales 2014 cuando este se convierta en agente libre dentro de diez meses.

Pero antes, Jimmy. ¿Que podrían ofrecer los Clippers en la operación? Ilustres veteranos como Tobias Harris, Patrick Beverley, Lou Williams, además de gente del nivel de Avery Bradley, Danilo Gallinari —si bien su contrato y problemas físicos resultan más complicados de envolver—, Mbah a Moute o Milos Teodosic. Piezas suficientes para convencer a los Wolves. No obstante, conociendo ya el deseo de Butler por irse a jugar allí, su dirección deportiva podría jugar con la carta: ¿por qué soltar mucho por un jugador que podrían conseguir gratis dentro de un año?

No nos vamos de Los Ángeles. Y es que, como mencionábamos antes al respecto de Kawhi, Butler también ve con recelo el unir fuerzas en los Lakers junto a un LeBron que, como es lógico, acaparará buena parte del protagonismo. Una falta de interés que resulta mutua. La front office púrpura y oro no está dispuesta a desprenderse tan pronto de sus jóvenes valores como Lonzo Ball, Brandon Ingram o Kyle Kuzma sin ver cómo cuajan estos junto a un hombre como LeBron, cuya sola presencia ya supone un importante salto de calidad en cualquier plantilla. Es más, tampoco tendría sentido que Magic y compañía se volvieran ahora locos apostando por Butler cuando pudieron conseguir hace unas semanas al propio Leonard. Y más cuando el próximo mercado contarán con el espacio salarial suficiente para abordar la llegada de otro jugador de élite.

Knicks y Nets, los otros equipos de la lista

Desde Los Ángeles nos desplazamos a la otra punta del país. A una Nueva York cuyos dos equipos completan la ya famosa lista de Butler. En segunda posición nos encontramos a unos Knicks que por las informaciones surgidas hasta el momento, tiran más de Butler que lo que este lo hace por ellos. Con Porzingis aún recuperándose, desde el Madison no tienen prisa de cara a esta campaña y mucho menos quieren precipitarse ofreciendo sus jóvenes jugadores y rondas de draft.

En tercera posición se encuentran unos Nets que han captado la atención de Butler por su situación financiera de cara al verano de 2019. Son otras de las franquicias que podrían albergar dos máximos en su payroll el próximo verano.

El traspaso de Butler, cuanto antes

Llegados a este punto, queda el cuándo. El deseo del jugador es que los Timberwolves le traspasen antes del próximo lunes 24, día en el que está programado el media day de la franquicia y que servirá como pistoletazo de salida del training camp. Un margen realmente escaso para unos Wolves que saben que el cierre del mercado (trade deadline) no llegará hasta las 21:00 del 7 de febrero de 2019. No obstante, dado el panorama y para evitar males mayores en un vestuario completamente roto, a los lobos no les queda más remedio que buscarle una salida a este cuatro veces all star y All NBA los dos últimos cursos cuanto antes.

*Este artículo ha sido elaborado con información de Shams Charania y Jon Krawczynski en The Athletic y de Adrian Wojnarowski en ESPN.