Robert Williams, 'rookie' de los Celtics, se cambia de casa para llegar antes a los entrenamientos
Williams tiene, desde la universidad, un historial de faltas de puntualidad que ya han afectado a los Celtics y que ahora quiere atajar.
Robert Williams vuelve a ser noticia por un asunto extradeportivo, muy relacionado con todo lo que se ha venido hablando de él desde la noche del Draft 2018. No de sus condiciones físicas, no de cómo puede encajar en un conjunto el de Brad Stevens que parece que roza con los dedos llegar al siguiente nivel, no de que era la pieza por la que irremediablemente iba a apostar Danny Ainge.
Williams, elegido en el número 27 del 'draft' el pasado mes de junio, tiene tras de sí un historial de problemas relacionados con la dejadez y la ética de trabajo desde que estaba en la Universidad de Texas A&M. Desde que está en los Celtics ya ha protagonizado alguna situación escabrosa, como quedarse dormido antes de una conferencia telefónica con la prensa, perder el vuelo para llegar al primer entrenamiento de la pretemporada o la propia cartera en varias ocasiones.
Precisamente esa noche del draft en la que le eligieron la pasó en su casa con familia y amigos y no presencialmente, algo mal visto por la NBA si se presume que el jugador puede ser escogido en la primera ronda.
Williams, en connivencia con los Celtics, ha decidido tomar una curiosa decisión para acabar con algunos de esos problemas: mudarse. La franquicia la había buscado otra casa más lejana, pero en la que vivirá durante la temporada (él es de Shreveport, en Luisiana) estará cerca del Auerbach Center, la nueva casa de entrenamiento de la franquicia. "Está a dos minutos andando, ya no puedo llegar tarde", ha asegurado el joven estos días en tono jocoso.