El verano de Carmelo Anthony está siendo movido. Tras hacer efectiva su player option por 27,9 millones de dólares con los Oklahoma City Thunder, la franquicia buscó con la colaboración del agente del jugador una salida para el alero. Y la encontraron en un traspaso a tres bandas con los Sixers que le mandó a Atlanta. Los Hawks, en una plena y profunda reconstrucción, tienen la idea de absorber parte de su suelo y dejarle libre (buyout) para que busque un nuevo horizonte donde competir.

Ese destino parece ser Houston. Con el visto bueno a medias de Mike D'Antoni, los Rockets parece que se lanzarán a por el alero de 34 años, que a pesar de no estar ni de lejos a su mejor nivel, aún posee una gran capacidad anotadora. Así lo ha confirmado Daryl Morey, mánager general de los texanos, en un encuentro virtual con aficionados. "Estamos en la pelea por él", contestó a la pregunta de un hincha sobre Melo. "Todavía tenemos algún as bajo la manga (para convencerlo)", señaló más tarde.

Su integración en los Rockets no es un inconveniente dentro del vestuario. Harden apadrina su llegada y Chris Paul es un gran amigo suyo. El problema reside en su capacidad de adaptación al sistema de D'Antoni, con quien coincidió en los Knicks, centrado en tiradores abiertos a la espera de las decisiones tanto de Paul como de Harden y en una defensa muy agresiva que ha perdido a dos piezas fundamentales como son Trevor Ariza y Luc Mbah a Moute. Además, podría tener incluso que aceptar un rol de sexto hombre. Una posibilidad que despertó su risa durante una rueda de prensa cuando aún era jugador de los Oklahoma City Thunder.