Ujiri pide perdón a DeRozan: "Necesitábamos algo diferente"
El mánager general de los Toronto Raptors habló sobre el traspaso de su ya exestrella y la llegada de Kawhi Leonard a la franquicia.
La salida de DeMar DeRozan ha sido traumática para una gran parte de los aficionados de los Toronto Raptors, franquicia a la que llegó directamente desde el draft de 2009 (puesto nueve) hace nueve años, en la que es máximo anotador histórico (13.296) y líder en minutos (22986) y partidos disputados (675). Los hinchas canadienses han disfrutado de la mejor etapa de siempre de su equipo con el liderazgo del escolta: cinco clasificaciones consecutivas para el playoffs, una final de Conferencia y su mejor récord de victorias en temporada regular la pasada campaña con 59. Era la tercera vez seguida que los Raptors superaban los 50 triunfos. Desde su aparición en 1995, Toronto nunca había pasado el umbral de los 50.
Estadísticas que valieron al cuatro veces All Star una ampliación de su contrato por cinco años y 139 millones en 2016 y una promesa este verano: a pesar de haber chocado en tres ocasiones contra el muro LeBron en los playoffs, no iba a ser traspasado. El cambio de Conferencia del Rey quitaba mucha presión a los Raptors y a DeRozan. Pero todo cambia y más todavía si se pone a tiro Kawhi Leonard, uno de los mejores jugadores actualmente en la Liga norteamericana. Una ocasión así no se puede dejar escapar y Toronto pulsó el botón nuclear, provocando la irritación del escolta. "No hay lealtad en este juego", escribió en redes sociales DeMar, que recibió el apoyo de un gran número de estrellas de la NBA. "Se merece una estatua", señaló su excompañero DeMarre Carroll. "Uno de los jugadores más leales que conozco", dijo a su vez Enes Kanter.
"DeMar ha hecho mucho por esta organización. Cuando estás en mi posición, siempre tienes que estar abierto a lo que puedas hacer. Ambos tuvimos una conversación, y DeMar y yo sabemos cuál fue esa conversación. Podría haberlo manejado mejor. Por eso me disculpo. Y no solo quiero disculparme con él por una posible falta de comunicación, sino reconocer todo lo que ha hecho por este equipo, por esta ciudad y por este país. No hay forma de medir lo que nos ha dado", dijo Masai Ujiri a los medios de comunicación. DeRozan colgó en Instagram un emoji de frustración y exasperación tras escuchar a su antiguo jefe.
El mánager general de los Raptors, en su aparición ante la prensa, defendió el movimiento a pesar de lo incómodo que ha sido desprenderse de una figura como DeRozan. "Todos sabían que teníamos que hacer algo diferente. Hemos estado haciendo lo mismo ¿cuántos años? No puedes seguir haciendo lo mismo una y otra vez. Y cuando tienes la oportunidad de conseguir uno de los cinco mejores jugadores de la Liga, cosa que no sucede muy a menudo, creo que tienes que saltar sobre él. Le hemos dado la oportunidad a este equipo, hemos tratado de construirlo tanto como hemos podido, pero, en este punto, esta oportunidad llegó y tuvimos que cogerla", continuó.
El salto, como dice Ujiri, es sin red. El experimento Leonard es necesario, pero también valiente: el alero finaliza contrato el próximo verano y su continuidad en Toronto se antoja muy difícil. Su intención, a priori, es migrar a Los Ángeles en julio de 2019. Pero ese no es el único problema. El estado físico de Kawhi es un misterio tras solo disputar nueve partidos la pasada temporada por una lesión en el cuádriceps derecho. Su forma de actuar en esta situación y su extraño carácter también son obstáculos a tener en cuenta.