La ACB despide con honores a Mumbrú tras colgar las botas
“Ahora me gustaría entrenar", explica en un acto con presencia de sus amigos. El Bilbao Basket piensa en él como un candidato al banquillo, además de Gonzalo García de Vitoria y Arturo Álvarez.
Mumbrú recibió un homenaje, tal vez el último, tras sus 21 años en la ACB. Rodeado de su familia y los que en cierto modo han sido parte de la misma durante este tiempo en las canchas (los Herreros, Navarro, Garbajosa, Rafa Jofresa, Vidal, Miralles, Roger Grimau, Alfonso Reyes...) ha dicho adiós con honores, en la sede de la Asociación de Clubes, ahí es nada. Atrás quedan 677 partidos en la Liga Endesa, aunque los últimos han revestido la amargura del descenso. Esta vez fue un discurso más reposado, no tan improvisado como en el adiós a Miribilla tras caer ante el Murcia. Se acordó de todos sus equipos, de antiguos dirigentes y actuales y de sus mejores momentos. Tampoco faltaron el presidente de honor de la ACB, Eduardo Portela; el director general de la Asociación, José Miguel Calleja; el de la Asociación de Entrenadores Joan María Gavaldà; el árbitro internacional José Antonio Martín Bertrán; y el doctor Jorge Guillén.
“Llevo un par de semanas haciéndome a la idea de la decisión que tomé”, iniciaba ante los asistentes tras asistir a un vídeo con momentos destacados de su carrera en la élite. “Se me ha acumulado el trabajo en Bilbao en los últimos meses, totalmente sumergido en intentar salvar al Bilbao Basket. No me paré a pensar ni un minuto en la situación que estaba viviendo. Pero sí, se terminó. Se ha acabado. He puesto punto final a mi carrera de jugador de baloncesto”, fue desgranando con ciertos nervios, sujetando el papel con las notas y el micrófono lejos de la boca.
Mumbrú hizo un repaso de su carrera, agradeciendo el apoyo, cariño y enseñanzas de todos los clubes por los que ha pasado, entrenadores de su trayectoria deportiva, excompañeros en equipos y Selección Española y de los aficionados. No se olvidó de los que le trajeron a Bilbao, la ciudad donde nacieron tres ed sus hijos,y del actual tesorero, Del Campo "sin él no existiría el baloncesto en Miribilla". El exalero tuvo un recuerdo especial para sus compañeros, los técnicos (en especial el "añorado Manel Comas"), la marea negra, los árbitros ("gracias por aguantar mis protestas en los partidos porque es complicado") y la familia. “Me siento feliz por haberlo dejado todo en la cancha. Nunca imaginé llegar donde he llegado y conseguir lo que he conseguido”, afirmó.
Se marcha como tercero en triples anotados en la historia de la ACB, quinto en minutos jugados, sexto en partidos, noveno en puntos… En el Bilbao Basket será difícil igualar sus cifras: en nueve temporadas llegó a la capitanía y es el jugador con más puntos, triples, recuperaciones, partidos y minutos jugados. “Seguro que me queda algo de baloncesto dentro, pero no sería al nivel que me gustaría. Me exijo demasiado cada día”, valoró.
Al final se emocionó. Posó con camisetas de todos sus equipos, sujetadas por Garbajosa (la de la Selección), Herreros (Madrid), Morales (Joventut) y Jesús Ramírez (Bilbao Basket). “El baloncesto me lo ha dado todo. Quizá más de lo que le he dado yo. Este ha sido mi sueño. Ha durado lo que tenía que durar. Ahora afrontaré otros retos e intentaré que sean dentro de las canchas”, aseguró. “Ahora me gustaría entrenar. Me gustaría poder ayudar, aportar mi experiencia como jugador. Formarme, estar con entrenadores de calidad y poder aprender”, reiteró. El consejo de administración del Bilbao Basket baraja, entre otras, la opción de nombrarle entrenador para la próxima campaña en LEB Oro. También están en las quinielas Gonzalo García de Vitoria, técnico del Ourense, y Arturo Álvarez, preparador del Prat, con conocimientos mucho más claros de la segunda categoría.
Los que le rodearon mostraron sus elogios: "Es un mito de nuestro baloncesto", se arrancó Alfonso Reyes. "Es un grande dentro y fuera de la pista, donde lo ha dado todo. Tengo la suerte de haber ganado grandes cosas a su lado y de ser su amigo", se sinceró Navarro. "Ha calado en los sitios en los que ha estado, a nivel de afición y sus compañeros", desgranaba Miralles. Y con Grimau tiene muchos puntos en común: "Esta despedida me remueve cosas porque yo hace poco que lo dejé. Muy contento de la carrera de Alex, de haber compartido cosas con él. Nuestros inicios y casi el final han estado juntos". Por último, Vidal remarcó que "sabe lo que le aprecian en todos los sitios que ha estado... tener esa guinda del pastel con amigos con los que has vivido muchos años es lo mejor".
El que no seguirá es Jonathan Tabu, con un año más de contrato pero posibilidad de ruptura. El base belga se despidió por las redes sociales: "Me gustaría agradecer toda la afición por estos dos años. Hemos tenido momentos malos pero yo prefiero recordarme de los buenos Y por eso muchísimas gracias. Por supuesto no puedo olvidar mis compañeros, el staff técnico, el staff médico y la gente atrás que ayuda el club para funcionar!!! Muchas gracias".