Hoy vuelve Curry: ¿repetirá su legendario regreso de 2016?
Los Warriors tendrán a sus cuatro all stars por primera vez desde el 8 de marzo. Hace dos años Curry volvió a lo grande ante los Trail Blazers. Final NBA: Rockets vs Warriors
Ya es oficial. Vuelve Stephen Curry. Los Warriors no lo han necesitado ni para superar sin ningún problema en primera ronda a los Spurs (4-1) ni para poner un 1-0 muy contundente (123-101) ante unos Pelicans que llegaban tras barrer a los Blazers. Con tres all star, Kevin Durant al mando del ataque y Draymond Green en su mejor versión en defensa, los Warriors pueden superar a los Pelicans sin Curry… pero necesitarán la mejor versión del base el resto del camino hacia lo que podría ser su tercer anillo en cuatro anillos. Especialmente si finalmente se da la final del Oeste que toda la NBA lleva esperando desde que comenzó la temporada: Rockets-Warriors.
Curry no juega desde el 23 de marzo, cuando regresó tras una lesión de tobillo y se volvió a lesionar, esta vez en una rodilla. Una lesión no muy distinta a la que sufrió en los playoffs de 2016. Entonces volvió posiblemente antes de lo debido y no estuvo en su mejor versión física en el resto de las eliminatorias, algo visible en la Final en la que los Cavs les remontaron un 1-3. “Con perspectiva, es probable que no fuera él mismo”, ha asegurado un Steve Kerr que confirmó que Curry jugará el segundo partido ante los Pelicans si no media contratiempo y que lo hará sin restricción de minutos. En 2016 Curry estuvo 15 días de baja por un esguince de rodilla de grado 1. Esta vez ha estado casi seis semanas por un esguince de grado 2.
Los Warriors no han querido tener prisa pero Curry vuelve. Será el primer partido en el que estarán los cuatro all stars desde el pasado 8 de marzo. Y si hay que fiarse de anteriores regreso del doble MVP (2015, 2016), los aficionados de los Warriors no tienen nada que temer del mismo modo que los de los Pelicans tienen razones para el pesimismo. En aquel partido del 23 de marzo en el que volvía después de dos semanas, sumaba (cuando se lesionó la rodilla) 29 puntos y un 10/18 en tiros en 25 minutos en pista. En diciembre se perdió 11 partidos (del 4 al 29) pero volvió el día 30 con un recital ante los Grizzlies: 38 puntos y 10/13 en triples sin apenas jugar en el último cuarto (26 minutos totales).
Pero el gran recuerdo es, claro, su regreso en los playoffs de 2016. Tras su lesión en primera ronda ante los Rockets (24 de abril), se perdió tres partidos ante los Blazers y volvió en el cuarto (9 de mayo), en Portland y con la serie 2-1 y los de Lillard asomando como un rival peligroso. Los Warriors ganaron en la prórroga y pusieron un ya mucho más tranquilo 3-1 con 40 puntos, 9 rebotes y 8 asistencias de Curry, que acabó con un 5/16 en triples y jugó casi 37 minutos aunque tenía en principio restricción marcada en 25. En una noche de récord, sumó 10 puntos en el último cuarto y 17 en la prórroga (125-132 final) y pasó de un 0/9 en triples en los tres primeros parciales a un 5/7 después con un 11/14 en tiros en los últimos 17 minutos de partido. Así que los Pelicans tienen que extremar precauciones esta noche porque Curry, además, libera la versión más intratable en lo colectivo de unos Warriors que, por su parte, mirarán la rodilla del base con la mente puesta en este partido pero, sobre todo, en los próximos.