Los Golden State Warriors volverán por quinta temporada seguida a los playoffs, pero lo harán sin ser como campeones de la Conferencia Oeste por primera vez desde 2015. Además, acabarán la Regular Season con más de 20 derrotas algo que no ocurría desde que Steve Kerr se sienta en el banquillo (2014). Un escenario desconocido. Un panorama que llega tras dos anillos y un subcampeonato, y un curso lastrado por las lesiones: Durant se ha perdido 15 encuentros hasta la fecha; Iguodala, 16 y Stephen Curry, 28. Solo en una de sus ocho anteriores campañas, el base había faltado tanto. Fue en la 2011-12, cuando solo estuvo en cancha 26 por ese tobillo derecho que por casi acaba con su carrera en la Liga.

Su ausencia en la primera ronda de los playoffs se da por hecha. Los Warriors buscan desde hace semanas la forma de paliar su baja de la mejor manera posible, pero sobre todo, de mantener la tensión en este último tramo de la temporada regular. Principalmente para no llevarse sustos inesperados: encender y apagar el piloto competitivo no es tan fácil. Algo que sabe Steve Kerr. El técnico se mostró muy duro con los suyos tras la derrota en Indiana contra los Pacers: "Estoy loco y avergonzado. Sé que este partido no significa nada para los cruces, pero los playoffs comienzan la próxima semana. El esfuerzo (que mostramos) fue vergonzoso, patético", dijo el entrenador, que admitió que esa falta de intensidad pudo llegar porque, en definitiva, ya no se juegan nada: "Tal vez sea eso". Según The Mercury News, Kerr no escondió su enfado en el vestuario, una vez que se certificó la primera barrida que sufren los Warriors con Kerr en el banquillo. La última, en la 2013-14: Charlotte. 

"Pensé que el encuentro nos importaba. Nos importó. Los últimos partidos nos importaron. Jugaron mejor baloncesto que nosotros. Salieron con una mejor estrategia. Fueron más agresivos que nosotros. Tomó un tiempo aumentar la nuestra. Lanzaron y rebotearon bien. Creo que a todos los de este vestuario les importaba el partido. No estoy de acuerdo (con lo que dijo Kerr), pero entiendo lo que está haciendo", subrayó Durant, que a pesar de sus 27 puntos estuvo mal desde el triple con un 2 de 10 para un 8 de 23 en tiros de campo. Golden State lanzó un 31% desde el perímetro por el 51,7% de unos Pacers que son la gran alegría de la temporada: de atracados en verano a equipo de playoffs y con opciones aún de acabar en cuarta posición con factor cancha a su favor gracias a sus seis victorias en los últimos siete partidos.

Bogdanovic, con 28 puntos, fue el máximo anotador de un encuentro que los Pacers controlaron a partir del segundo cuarto gracias a un parcial 35-25 que dio paso al 35-26 del tercer periodo. Indiana cerrará la temporada en Toronto y Charlotte. Los de Carolina del Norte también serán su rival en la última jornada. Por su parte, los Warriors recibirán en el Oracle a los Pelicans y viajarán a Phoenix y Utah.