Doncic decide y el Madrid cierra 2017 con 7 victorias seguidas

Derbi madrileño como despedida al 2017. A la rareza de jugar en Nochevieja súmenle el ver al Real Madrid con camiseta de mangas. En pijama, dicen los más guasones. Buen paralelismo con la siesta que se echaron los blancos. Al verse 13 arriba (42-29) en pleno carrusel de faltas tontas del Movistar Estudiantes en el segundo cuarto dieron la contienda por resuelta. Luka Doncic, inédito en el primer periodo, castigaba con su clase y envergadura a Brizuela. Su irrupción marcó el despegue de los blancos. Cook y Cvetkovic pusieron orden a tiempo al anárquico ataque de los colegiales que, con buenos minutos de Vicedo y Peña, se las ingeniaron para llegar vivos al descanso (46-39).

Los blancos se atascaron tras el paso por vestuarios. Todo lo contrario que Sylvan Landesberg. Liberado de Yusta, quien le secó en los compases iniciales, el estadounidense se desató en una segunda mitad en la que firmó 26 de sus 29 puntos. Dirigió un 0-11 de parcial que volvió a poner las tablas en el marcador (50-50). Pablo Laso se hartó y tras un tiempo muerto cambió el quinteto al completo que estaba en pista. Regresaron Doncic y Reyes a pista (otro día más, los más valorados de su equipo) y el Real consiguió recuperar la iniciativa. Aunque sin despegarse. El Estu aprovechaba cualquier situación para sumar puntos fáciles al contraataque. 

Entregados a Landesberg en ataque, los de Maldonado subieron la intensidad atrás. Giro de 180º al encuentro. Solo Carroll insuflaba aire en el inicio del último acto a un Madrid incapaz de frenar a Landesberg. Le salía todo lo que intentaba y cuando no, forzaba con penetraciones para sumar desde la línea. Los del Ramiro llegaron a colocarse por delante (70-74). Era el momento de recurrir a Doncic, quien regresó con su equipo aún por debajo (77-78, 5 minutos para la conclusión). Bonito duelo el que mantuvo con el '15' rival. El cañonero colegial llegó exhausto al desenlace. Todo lo contrario que el esloveno, que decidió el partido en todos los frentes. Consiguiendo segundas opciones en ataque (ocho rechaces en total), convirtiendo su único triple en un momento clave, sumando desde la línea de tiros libres (9/9 para un total de 24 puntos) y distribuyendo juego a sus compañeros (5 asistencias). El MVP de la jornada ACB acabó con 33 de valoración y escuchando los cánticos del WiZink Center: "¡Luka, quédate!".

Pese a seguir sin Llull, Rudy, Randolph, Ayón y Kuzmic (todo un quinteto), el Madrid cierra 2017 con siete victorias consecutivas entre Liga Endesa y Euroliga y en su mejor momento de la temporada. El Estudiantes nunca bajó los brazos, ofreció una gran imagen y llegó a acariciar el triunfo. Pero se topó con un niño de 18 años que en este 2017 al que ahora decimos adiós se ha consolidado como uno de los mejores jugadores de Europa. Sino el mejor. ¡Feliz 2018!