Un último cuarto escandaloso y los Rockets suman 14 seguidas
Eric Gordon incendió el aro rival en el cuarto cuarto (17 de sus 33 puntos totales) y Capela acabó con 24 puntos y 20 rebotes.
Durante tres cuartos, los Jazz defendieron mejor que nadie al mejor ataque de la liga. Dejaron a los Rockets en un 9/31 en los triples y mantuvieron el partido controlado. Harden no encontraba la fluidez necesaria en sus movimientos y los puntos gratis no llegaban (a la contra, tras pérdida del rival...). Pero todo cambió en los últimos 12 minutos. Qué poco necesitan estos Rockets para incendiar un partido.
No fue Chris Paul. Tampoco James Harden (26+6+6, pero 6/17 en el tiro). La metralleta que cambió el partido fue la de Eric Gordon. El escolta, más peligroso si cabe por la atención que reciben los otros dos monstruos, iluminó la noche de Houston con 17 de sus 33 puntos en un último cuarto ante el que nada pudieron hacer los Jazz. Clavó cinco triples en los últimos minutos (8/12 el equipo en el cuarto cuarto) y los Rockets pasaron del -8 al +21 final para cerrar su decimocuarto triunfo consecutivo (25-4 total).
Harden pasó los 900 puntos (primer jugador que lo consigue esta temporada), el invicto Chris Paul firmó un nuevo doble-doble (18+10) y Clint Capela se puso las botas en la pintura, aprovechando cada ventaja regalada por los exteriores (24+20, 10/12 en los tiros).
De poco sirvieron los 26 puntos de Hood, los 14 de Ricky o los 17 de Joe Ingles (Donovan Mitchell se quedó en seis puntos). van 14 seguidas de los Rockets (la mejor racha de la franquicia desde las 22 de McGrady y compañía en 2008) y 15-0 con CP3. El +26 total del último cuarto de ayer (41-15) es, además, el diferencial más alto de la historia de la franquicia y el más alto de la temporada NBA en un último cuarto (ESPN).