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New Orleans Pelicans: Davis, Cousins... y muy poco tiempo

Último año de contrato para Cousins, así que o las Torres Gemelas funcionan ya o... Clave la aportación de Rondo, Holiday, Moore, Clark...

New Orleans Pelicans: Davis, Cousins... y muy poco tiempo

NEW ORLEANS PELICANS

Entrenador: Alvin Gentry

Posible Quinteto: Jrue Holiday, Rajon Rondo, E’Twaun Moore, Anthony Davis, DeMarcus Cousins

Otros jugadores importantes: Tony Allen, Ian Clark, Jordan Crawford, Dante Cunningham, Solomon Hill.

Balance 2016-17: 34-48 (11º en el Oeste), fuera de playoffs.

Objetivo 2017-18: Estar en playoffs y atar a la pareja Davis-Cousins.

Hay un momento en el que el reloj deja de ir hacia adelante y empieza a ser una cuenta atrás en la relación entre una gran estrella y un equipo que no arranca. Anthony Davis llegó a los Pelicans en 2012 y ha sido todo lo que se esperaba de él y más… pero su equipo no. Solo una temporada por encima del 50% de victorias (45-37) y solo un año en playoffs, saldado con una derrota por 4-0 en primera ronda ante unos Warriorrs embalados (2015) hacia su primer título en 40 años.

Davis tiene contrato hasta 2020, con una player option de 28,7 millones para la temporada 2020-21. Con 24 años y ya un oro olímpico, obviamente Davis quiere más. Y obviamente los Pelicans empezaban a sentir la urgencia de dárselo. Así se gestó en febrero, y en pleno All Star Weekend precisamente en Nueva Orleans, la llegada entre los festejos del Mardi Gras de DeMarcus Cousins. Ya no había tiempo para solucionar la temporada: quedaban 25 partidos de los que Cousins y Davis jugaron juntos 17 con un balance de 7-10.

Ahora, borrón y cuenta nueva, empieza curso pero a DeMarcus le queda un año de contrato. Si los Pelicans quieren que funcionen sus Torres Gemelas, tienen que conseguirlo ya. Para ello necesitan construir una buena química entre ambos y, sobre todo, sacar petróleo de un roster con serios agujeros en el resto de la pista. En julio Jrue Holiday (un muy buen base que necesita mantenerse sano) firmó un nuevo contrato por 5 años y 126 millones. Con su particular big three asegurado, el trabajo en los despachos se ha basado en que el resto pueda aportar más. Y mejor.

Para eso llegan veteranos como Rajon Rondo y Tony Allen y jugadores a la caza de su segunda oportunidad NBA como Darius Miller y Jordan Crawford, reclutado en marzo con prometedores números (más de 14 puntos de media en el rush final de la temporada). Con los contratos de Asik y Ajinca a cuestas, gran parte del futuro pasa por lo que puedan ofrecer secundarios como Ian Clark (que quiere probarse tras su etapa de suplente sin exigencias en los Warriors), Dante Cunningham (y más tras la grave lesión de Solomon Hill) o un E’Twaun Moore al que se le reserva un rol importante como defensor con buena mano (los Pelicans necesitan de forma dramática tiro exterior). Alvin Gentry, que estará en la cuerda floja si la cosa no arranca, ha dejado claro que habrá muchos quintetos con tres pequeños (casi siempre Holiday y Rondo juntos) y la pareja Cousins-Davis, que será la base fundacional de los Pelicans del futuro o un coloso de dos cabezas que se desmoronará hasta llevar a la franquicia al subsuelo de la regeneración. Hay potencial pero los playoffs del Oeste están muy caros… y el tiempo se agota. Tic, tac, tic, tac…