Joel Embiid: otra operación y otra temporada en blanco

Joel Embiid no levanta cabeza. El pívot camerunés, llamado a ser una de las fuerzas interiores de la próxima NBA, seguirá sin debutar y se enfrenta a una nueva operación que incluso pone en peligro su carrera después de que su pie derecho no haya terminado de recuperarse de la fractura por estrés que le llevó al quirónafo hace más de un año. Las lesiones en el pie son terroríficas para todos los jugadores, con Kevin Durant como la última gran estrella en sufrir ese calvario, pero especialmente para los pívots, que cargan con muchos más kilos y más volumen corpora. Una lesión similar a la de Embiid fue la que llevó a la retirada a Yao Ming.

Embiid mide 2,13 y pesa más de 110 kilos. Y pudo ser número 1 del draft de 2014, uno de los más anticipados de la historia. Cayó al número 3 y se lo llevaron los Sixers, elegido por detrás de Andrew Wiggins y Jabari Parker por el tremendo talento de estos dos… y por sus problemas con las lesiones. La espalda le hizo perderse el tramo final de su única temporada en Kansas, incluido el torneo universitario. Philadelphia corrió el riesgo que no asumieron ni los Cavaliers ni los Bucks pero Embiid se perdió toda su temporada rookie por una fractura en el pie que no ha terminado de curarse de la forma debida y que ahora, trece meses después, le devuelve a la sala de operaciones y le sitúa ante una segunda temporada en blanco y en la que salvo sorpresa tampoco se estrenará como jugador NBA.

El riesgo es serio para un jugador de 21 años que el próximo marzo, otra vez salvo milagro, cumplirá dos años sin jugar un partido. Además, su situación contractual también se va a complicar en un futuro inmediato: cobrará 4,6 millones esta próxima temporada pero los Sixers tienen que decidir antes de que termine octubre si ejercen su derecho sobre él para, todavía dentro de su contrato rookie, la siguiente: 2016-17. Unos Sixers que han vuelto a elegir a un pívot Jahlil Okafor con el número 3 del draft y que también cuentan con Nerlens Noel, número 6 en 2013 y otro que se perdió por lesión (de rodilla en su caso) su primera temporada pero ya ha despuntado en la pasada y en su estreno en la NBA.