Francisco García renovó este verano con los Rockets, franquicia a la que llegó en mitad de la temporada 2012-13 tras haber pasado sus siete primeros años y medio en Sacramento. Tras brillar en el pasado Mundial de España con la selección de la República Dominicana disfruta con la buena marcha de Houston: sólo los Warriors de Curry les superan en la clasificación global de la NBA. Sin contar con un papel destacado, el escolta-alero dominicano cumple con la misión de dar minutos de descanso a hombres como James Harden o Trevor Ariza, fundamentales en el esquema de Kevin McHale.

Anoche, en la victoria ante los Suns, García se marchó sin anotar (erró el triple que intentó) aunque capturó tres rebotes y recuperó un balón en los 9 minutos que estuvo sobre el parqué, su menor cifra en los últimos nueve partidos, seguramente debido al regreso de Patrick Beverley. En lo que va de curso promedia 3,2 puntos, 1,2 reboyes y 1,1 asistencias en 14,3 minutos. En el debe, sus malos porcentajes de tiro: sólo anota un 27,0% de sus lanzamientos. Algo que debe intentar mejorar para ver aumentada su presencia sobre el parqué. 

El otro latino en jugar la última noche fue el brasileño Leandrinho Barbosa. El escolta tampoco tuvo una actuación destacada en la victoria de sus Warriors en el United Center ante los Bulls. Apenas tuvo incidencia en los cinco minutos que disputó.

Por su parte, ni Manu Ginóbili (con molestias en el hombro izquierdo) ni Tiago Splitter participaron en el cómodo triunfo de San Antonio ante Minnesota. No obstante, el pívot brasileño podría jugar su segundo partido de la temporada el próximo marrtes.