La nariz de LeBron tiene imán: tras Ibaka, le golpeó Howard

No fue el día de LeBron en Houston. La racha de victorias de los Heat se quedó en 8 y ‘el Rey’ pasó de los 61 puntos ante los Bobcats a un segundo tiempo opaco en Houston, en el que sólo anotó un tiro de campo y, sin puntos en el último cuarto, falló el triple que a la desesperada pudo significar el empate ante los Rockets. Pero es que además, y en esa última jugada, agravó su fractura de nariz tras un tremendo choque con Dwight Howard.

Después de un triple de Beasley, los Heat se pusieron a tres después de haber estado 13 abajo en el inicio del último cuarto. Houston sacó de fondo y Harden, presionado y a 15 segundos del final, lanzó un pase muy arriesgado al otro lado de la pista y hacia Howard. LeBron fue a robar y colisionó en el aire con el pívot.

El impacto, en la nariz que lleva protegida con una máscara tras la fractura que sufrió por un golpe de Ibaka ante los Thunder, quedó más dañada. LeBron siguió en pista y lanzó el tiro que pudo valer el empate, pero ahora es duda para el próximo partido de Miami, nada menos que la reedición de la última final, ante San Antonio Spurs el próximo jueves. Tras la primera lesión, sólo se perdió un partido, ante Chicago Bulls. En los cuatro partidos siguientes, con máscara, ha promediado 33’5 puntos con un 63% en tiros de campo incluido el mejor partido en anotación de su carrera, los 61 puntos ante los Bobcats.