La selección de Costa Rica llegó a la Copa del Mundo Rusia con un único objetivo en mente: repetir lo logrado en Brasil 2014. El seleccionado dirigido entonces por Jorge Luis Pinto cosechó un par de victorias frente a Italia y Uruguay, además de alcanzar el empate contra Inglaterra que les permitió acceder a los octavos de final, en donde vencieron a Grecia para posteriormente avanzar a la siguiente fase.
Ahí, cayeron ante Holanda, quedando a un sólo paso de las semifinales, aunque el buen sabor de boca había quedado ya en la boca de quienes esperaban un papelón por parte del combinado tico.
En esta ocasión, el grupo luce más accesible que hace cuatro años, por lo que la ilusión de alcanzar las fases finales del torneo vuelven a aparecer en el horizonte de 'La Sele'.
No obstante, esa esperanza podría traducirse también en presión adicional que han buscado borrar dentro de un plantel que aún conserva a muchas de sus figuras de hace cuatro años en el plantel. Celso Borges, uno de los líderes dentro del vestidor tico, cree que "es normal la expectativa que hay sobre ellos en el país, pues deberán saber lidiar con la presión detrás de ello".
En ese sentido, Giancarlo González también se aventuró a hablar de la hazaña de 2014, manifestando su intención de repetirlo para el Mundial comenzado hoy. "Podemos soñar, pero soñemos con humildad paso a paso, primero hay que ganar el primer partido contra Serbia", declaró para Teletica.
Y es que el debut mundialista termina por ser siempre uno de los encuentros trascendentales para las selecciones que aspiran a ir más allá dentro del certamen. "Es vital comenzar con un triunfo porque nos va a marcar lo que resta el torneo. Para nosotros es esencial comenzar con una victoria y después veremos lo que viene", estableció Borges.
Así, 'la Sele' se prepara para su primer encuentro a llevarse a cabo este domingo, para posteriormente chocar contra Suiza y Brasil por un boleto a la siguiente fase del torneo.