La plata o la vida en el Pizjuán
Un Madrid sin Cristiano y plagado de suplentes persigue ser segundo. El Sevilla busca Europa en el patriotismo de Joaquín Caparrós.
EI Sevilla ha estado en Europa en doce de las últimas trece temporadas y ahora se ve octavo, con la sexta plaza casi fuera de su alcance y con el Getafe, séptimo, un punto por encima. Ello explica las destituciones de dos entrenadores y la apelación final al patriotismo de Caparrós, que trae una receta casera para evitar el doble desastre: no estar en la Europa League cuando sí lo estará el Betis.
Para él técnico de Utrera estaba pensada otra cosa y en otro tiempo. Regresaría al club la próxima temporada para darle una orientación sevillista al director deportivo que venga, pero el equipo había sumado sólo tres de los últimos 21 puntos y quedó declarado el estado de emergencia: Caparrós, al banquillo.
Caparrós ha jugado 28 veces contra el Madrid y sólo le ha ganado seis, la última en el banquillo del Athletic, en 2010. Pero el club entiende que es hora de tocar el corazón de la afición. El día después de la ‘manita’ del Betis en Nervión, explicaba: “Aprecié frialdad y apatía. Vi mensajes de Serra y una espectacular carta de motivación del doctor Calero en el Betis. Lo que nosotros hacíamos antes. Y ellos tenían más canteranos. Nosotros queríamos que jugaran hasta los recogepelotas...”. Eso trae al Sevilla. En la víspera entrena en el Pizjuán, ha subido dos canteranos, ha buscado el compromiso en los ojos y más abajo, en arranque racial y casi grosero.
Sandro y los suplentes del Madrid
También ha tocado el equipo. Sandro, fichaje invernal, sólo había sido titular cuatro veces. Le puso ante la Real y le pondrá hoy, pese a que no ha marcado un gol, por delante de los dos anotadores del equipo, Ben Yedder y Muriel, menos laboriosos. También echó mano de otro proscrito, Roque Mesa. Cubrirá la baja de Sarabia, sancionado, con Franco Vázquez, quizá acuda a Correa y es posible que se ahorre de salida a Banega, apercibido, porque el sábado le aguarda un derbi, la otra Liga del Sevilla.
En el Madrid, que será temporalmente medalla de plata si gana, toca cambio de guardia extremo. Sancionado Bale y caídos Carvajal y Cristiano, se anuncia que el resto de titulares pasará la noche en el banquillo o en Madrid. Partidos así ya hubo al menos cinco la temporada pasada pero aquellos suplentes no eran estos. James jugó más del doble de minutos que Ceballos y lo mismo vale para Pepe y Vallejo. Los cinco fichajes son los cinco jugadores de campo de la plantilla que menos minutos han jugado. La ilusión del verano ha quedado en una bolsa de marginación. Hoy se espera a los cinco, a Kovacic, otro que se ha quedado a mitad de la escalada; a Casilla, que saldrá en junio, y a Lucas Vázquez y Asensio, que viven en ese limbo feliz entre la titularidad y la suplencia. Sumados, valen 19 goles y 21 asistencias. Un tesoro.