Se decidirá en Porto Alegre
Independiente, pese a jugar más de una hora con un hombre menos, pudo empatar con Gremio de Porto Alegre (1-1) en la ida de la final de la Recopa Sudamericana.
En los primeros veinte minutos, Independiente fue superior. No tuvo más posesión que Gremio, pero supo aprovechar su velocidad en ataque para hacer daño a un equipo brasileño que concedió demasiado en los últimos metros del terreno de juego. Meza, Benítez y Menéndez supieron combinar con toques rápidos y precisos para ganar espacios en campo rival. Gaibor, el ecuatoriano, se estrenó con un auténtico partidazo en la medular del 'Rojo'.
Fue en el minuto veintiuno cuando parecía que nos quedabámos sin partido. En una salida de pelota de Independiente, Amorebieta cometía un error y Luan, el más listo de la clase, con una velocidad de vértigo y una definición quirúrjica hizo el primer tanto del encuentro para los brasileños. Saltaba la sorpresa porque el 'Rojo' hasta ese momento había sido el único que mordía sobre el césped.
El equipo dirigido por Ariel Holan recibiría otra mala noticia solo unos minutos después. En un envío largo para Gigliotti, el delantero pelearía con Walter Kannemann y, después de caer el defensor y revisar la jugada con el VAR sería expulsado. Una cartulina roja que sentó muy mal a toda la hinchada y al propio Gigliotti.
Muchos pensarían que, con esa desventaja y un jugador menos Independiente bajaría los brazos. Pues no. El 'Rojo' (además, ayer más que nunca con la equipación que estrenó) dominaría aún más desde la expulsión. Holan reorganizó a los suyos con Menéndez en el costado izquierdo, Meza en el derecho y Martín Benítez haciendo la función de '9'. El recién llegado fue un puñal por esa banda zurda. Su velocidad le hizo ser uno de los jugadores que más desbordó e inquietó a la defensa rival.
El empate lo firmó el mencionado Gaibor. El ecuatoriano colgó una pelota dentro del área que Grohe no pudo parar y, sin tocar en nadie, se coló dentro de la portería. Un tanto que mereció en todo momento el 'Rojo'.
Se llegaría con empate al segundo tiempo. En ese periodo no se vio el ritmo que tuvimos en el primero, aun así los dos equipos pudieron hacer gol. Amorebieta salvó una jugada clave en la que Luan remataba sin oposición y terminó con un duro golpe en la cara al chocar con la rodilla del atacante brasileño.
Mención aparte para el gran partido de Walter Kannemann y Pedro Geromel. Los dos centrales sostuvieron como pudieron a un equipo muy débil en defensa. El argentino, además, contó con el plus de que Jorge Sampaoli estuvo observando desde las gradas. En una entrevista a Diario As concedida en las últimas horas reconocía que sueña con el Mundial y que el seleccionador argentina no le ha llamado.
El cansancio hizo mella en los últimos minutos de un Independiente que jugó más de setenta con un jugador menos. La pelota pasó a ser de los brasileños, pero no lograron crear peligro suficiente para inquietar a un Campaña que se mostró más que seguro bajo los palos.
De hecho, se vio que los dos equipos bajaron la persiana y pensaron más en mantener el resultado que en atacar al contrario. Los goles de visitante no tienen valor doble en esta competición. La vuelta de la final de la Recopa Sudamericana será el día 21 de febrero en el Arena do Gremio.