Chivas remonta a Pachuca y son Campeonas de Liga MX Femenil
Guadalajara Femenil se erige como el primer equipo Campeón en la competición femenina, gracias a una gran remontada en el juego de vuelta. Monterrey vs Tijuana en vivo, Liga MX
Porque en el futbol nada está escrito mientras no se escuche el silbatazo, hay que creer. Porque la gloria está hecha de capítulos épicos en los que superar la adversidad es una constante, hay que creer. Porque este equipo ya había hecho mucho más de lo presupuestado, ellas creyeron. Y lo lograron. Chivas ha remontado en la vuelta. La historia del club es grande, pero ellas han comenzado a escribir la propia. El 3-0 sobre Pachuca da rienda suelta a un grito: Guadalajara, primer campeón de la Liga MX Femenil.
Noche de historia pura en el Estadio Chivas. Noche de conocer al primer campeón de la Liga MX Femenil. Con el 0-2 en contra de la Ida, la obligación es paras las rojiblancas. En su cancha, con el cobijo de su gente, el partido es completamente distinto al del Hidalgo.
Se apodera Guadalajara del esférico. Poco a poco, busca abrir el camino, porque en una Final, la esperanza nunca puede darse por muerta. Minuto tres: pelota profunda. Brenda Viramontes puntea, se quita a la arquera. No busca la falta. Persigue la redonda. Le falta fuerza para mandar la diagonal. Se pierde la opción.
Arlett Tovar prueba por primera vez en la noche. La defensa central hace tres cosas muy bien, además de su función habitual: patear penales, cobrar tiros libres y agregarse al ataque en tiros de esquina. Acomoda la bola luego de una falta y su disparo es desviado a córner por Alejandrina Godínez.
Cuando Pachuca intenta reaccionar, ahí está Blanca Félix. La guardameta del Rebaño sagrado ha saltado repentinamente a la fama. La nacida en Colonia Sinaloa, un rancho de 500 personas, ofrece seguridad a su equipo. Primero sale a toda velocidad para impedir que Jaqueline García remate cómoda (‘20) y después atrapa un remate de Berenice Muñoz (‘29). Cuando se le exige, responde. En la tribuna está su mamá, su abuela, tías y amigos que han venido desde su lugar de origen.
Los minutos transcurren. Tiro de esquina por el costado izquierdo. Cobra la capitana Tania Morales. Al corazón del área. Salto preciso de Arlett Tovar. Cabezazo con enorme colocación. A las redes. Gol de la zaguera central, al ‘36. Lo dicho: no sólo su función la hace bien. Agregada al ataque, es un peligro permanente para cualquier zaga.
Y el gol, como dice la delantera rojiblanca Brenda Viramontes, es vida. El Guadalajara recibe oxígeno puro antes del descanso. La ilusión está más viva que nunca. La remontada es posible. Por eso, sale el equipo a la parte complementaria decidido a buscarla. Al ‘48, se anula un tanto de Susan Bejarano por fuera de lugar.
La tribuna está encendida. El Estadio Chivas está casi lleno. Ha impuesto un récord de asistencia para el futbol femenil de México: 32,466 aficionados. Se percibe confianza. Tiro de esquina. Ahora por el costado derecho. De nuevo patea Tania Morales. La capitana pone la bola pasada. A segundo poste, otras vez Arlett Tovar. Gana el salto. Empuja de cabeza. Gol del Guadalajara. Es el 2-0 y empata el global 2-2, al ‘55.
Sólo entonces, las Tuzas despiertan. Pero atrás, el Rebaño Sagrado tiene una figura monumental. Mónica Ocampo recibe sola dentro del área. Blanca Félix sale a toda velocidad. Tapa. El rebote queda en pies rivales. La guardameta se lanza casi de cara. Valiente. Sin temor alguno. De nuevo salva a Chivas, al ‘60.
Con una jugadora tiene detalles como ese, es fácil contagiar. El equipo entiende que es momento. Que se puede. Qué debe buscarlo. Luego de un rebote, Brenda Viramontes pelea la pelota. Como puede, la alcanza a puntear. Sale un pase profundo. Deja sola a Norma Palafox.
La sonorense encara a Alejandría Godínez. Mano a mano. La tribuna se pone de pie. Expectación en un flashazo. Hace una finta. Dispara cruzado. Pierna derecha. Supera a la única adversaria que tiene enfrente. Avanza como en cámara lenta. Alcanza las redes. Explota el estadio. Gol de Chivas. El 3-0. El de la remontada en el global ha llegado al ‘67.
Es una fiesta la casa del Rebaño Sagrado. Aparece la ola. También el grito de batalla que durante décadas ha respaldado a quienes portan la rojiblanca: “Chivas, Chivas”. El tiempo se diluye lentamente. El Guadalajara defiende con todo su ventaja. Pachuca insiste con mucha desesperación y poco futbol.
Silbatazo final. Euforia absoluta. Las rojiblancas se abraza. La historia del equipo varonil es gloriosa, ahí está, pero estas mujeres han comenzado a escribir la propia. El equipo en quien nadie creía hoy saborea la gloria. Chivas, primer campeón del futbol femenil profesional en México.