Mertens, líder de la goleada ante Estonia con un hat-trick

Bélgica se dio un homenaje ante Estonia (8-1) en un plácido partido para los hombres de Roberto Martínez. Mertens se erigió como el gran protagonista del choque al marcar tres tantos y asistir a Hazard en otro. Además, Carrasco, que jugó como carrilero largo, marcó uno y dio la asistencia del primer gol de Meunier y Lukaku encontró el premio a su gran partido con dos tantos en los minutos finales.

Bélgica sigue intratable, de momento, en esta fase de clasificación para el Mundial de Rusia. Lidera el grupo H con pleno de victorias (cuatro de cuatro) y la friolera de 21 tantos a favor, más de cinco por encuentro, lo que demuestra el arsenal ofensivo con el que cuenta el español Roberto Martínez en sus filas. Contra Estonia, el partido apenas tuvo historia. Los belgas salieron a sentenciar desde el inicio y antes del descanso ya lo habían conseguido.

Con un ofensivo once, tres centrales, dos carrileros largos (Meunier y Carrasco) y todo su arsenal arriba (De Bruyne, Hazard, Mertens y Lukaku) no dieron opciones a los estonios desde el inicio. Porque el primer tanto llegó muy pronto. En el minuto 8, Carrasco se perfiló desde el carril izquierdo para buscar la entrada del otro carrilero. Meunier no desaprovechó el regalo e hizo el primero de cabeza. Cuatro minutos después Lukaku, que se marcó un partidazo, se encontró con el poste. Y poco después, Mertens empezaba su particular recital con un tanto tras jugada de estrategia en el que contó con la colaboración de Klavan. Apenas habían pasado 15 minutos y Bélgica ganaba por dos goles, aunque pudieron ser más. Porque los de Martínez no se relajaron, todo lo contrario, y en el 25' llegó del tercero de Hazard tras asistencia de Mertens. Entonces el partido sí que bajó un poco el ritmo, lo que aprovechó Estonia para acortar distancias en la primera ocasión de peligro que gozó. Anier se aprovechó de un robo en el área contraria para hacer el tanto del honor de los suyos.

Con esa ventaja se llegó al descanso, pero Bélgica no quería sustos. Por eso, siguió llegando a la portería de Aksalu con peligro para aumentar su renta. Y, como no podía ser de otra manera, los goles fueron cayendo. En casi cinco minutos, del 62' al 67', los belgas marcaron otros tres tantos. Carrasco aprovechó una asistencia de Lukaku para hacer el cuarto y Mertens completó su particular hat-trick con otros dos goles, espectacular el último de vaselina desde dentro del área. Martínez quiso premiar entonces al jugador del Nápoles, el mejor del encuentro, quien se llevó una gran ovación en su cambio, y dio descanso a un Hazard que se marchó ligeramente tocado. Parecía que el partido moriría ahí, con ese 6-1, pero Lukaku buscó con ansia su golito. Y, como dice el refrán, el que la sigue la consigue y el jugador del Everton marcó dos tantos en el tramo final para dejar el marcador en un espectacular 8-1.

Bélgica se mostró muy superior a Letonia y sigue firme su camino hacia el Mundial de Rusia. Con la calidad que tiene, sobre todo arriba, no lo tendrá complicado. Mientras seguirá deleitando a sus aficionados goleada tras goleada. Y es que 21 goles a favor en cuatro partidos es una cifra al alcance de muy pocos...