Sonia Ferrer habla por primera vez de la negligencia médica que pudo costarle la vida
La reconocida presentadora ha querido compartir con sus seguidores lo que le sucedió con 15 años, cuando sufrió un tumor de hueso.
La muerte de la periodista Olatz Vázquez ha causado gran conmoción durante los últimos días en las redes sociales, haciendo que multitud de personalidades se hayan pronunciado y no sólo manifestado su pésame públicamente. La presentadora Sonia Ferrer ha sido quien mayor protagonismo ha acaparado lamentando el fallecimiento de la periodista vasca, y aprovechando para compartir con sus seguidores una experiencia de lo más traumática que vivió con 15 años y que ha recordado tras la desafortunada pérdida durante estos últimos días.
Tardaron tres años en diagnosticarle el tumor
"Yo tenía 15 años y un tumor de hueso en la columna que me estrangulaba la médula. Una supuesta eminencia en traumatología le dijo a mi madre que tenía un dolor imaginario y quee sólo quería llamar la atención. Lo que empezó siendo ocasional, se volvió diario", comenzó relatando en las últimas horas sobre la traumática experiencia que vivió siendo una adolescente.
"Caía al suelo y convulsionaba con unos dolores inhumanos. Intentando calmarlos, me pinchaba Nolotil a diario y tomaba todo lo que llegaba a mis manos y claro, mi orina acabó manchada de sangre. Tenía ya 16 y un 'gran' urólogo insinuó delante de mi madre y mi abuela que viviendo sola en el exrtrajero, a saber con quién me habría acostado y qué infección podría haber pillado (vivía sola, sí, pero seguía siendo virgen aunque nadie parecía creerme). Un dentista me quitó las muelas de juicio porque sin duda se debía a un dolor reflejo", continuó.
"También llevé un alza en el zapato izquierdo porque un osteópata dijo que tenía una pierna 1cm más larga que la otra. Llegaba a urgencias rompiendo la ropa con los dientes, llorando y gritando porque el dolor era insoportable y me daban el alta diagnosticándome 'gases'. Y así casi tres años, hasta que el Dr. Frederic Font Vila pensó que aunque no tenía la edad de la estadística, podía tener lo que tenía. Con casi 18 años ya el tumor era demasiado grande para que el riesgo de tocar la médula al quitarlo no fuese casi inevitable", añadió.
Antes de que sus miles de seguidores no dieran crédito a esta traumática historia, Sonia Ferrer sentenció diciendo que "acabó todo bien, porque aquí estoy, caminando y bien, pero pudo no haber sido así. Nunca, ninguno, supo decir 'no sé lo que te pasa'. ¿Tan difícil es? No sé bien qué me ha llevado a compartir esto, supongo que la historia de Olatz me ha tocado", lamentó finalmente la presentadora sobre la muerte de la periodista.