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Kim Kardashian revela la razón de su separación de Kanye West: "Me siento una fracasada"

La influencer ha hablado en el capítulo de esta semana de 'Keeping Up With The Kardashians' del detonante de su relación con el famoso rapero.

Imagen de Kim Kardashian y Kanye West.

En Estados Unidos está saliendo ahora uno de los momentos más esperados de la televisión, y es que esta semana se ha emitido el programa de 'Keeping Up With The Kardashians' en el que Kim Kardashian habla de la crisis que atravesó con Kanye West en diciembre de 2020, la cual desembocó en el divorcio después de seis años casados.

En el reality de una de las familias más populares del país, se muestra la conversación que se produce durante una escapada familiar al Lago Tahoe, Sierra Nevada, donde Kim de repente rompe a llorar al pensar en el fin de su matrimonio con el rapero. "Me siento como una fracasada. Es mi tercer matrimonio. Me siento como una maldita perdedora", comenzaba señalando.

Tras ello, la influencer contó a sus hermanas que Kanye West no había viajado con toda la familia debido a una gran discusión que mantuvieron: "Mi matrimonio está completamente estancado, me siento atrapada".

El motivo de su separación de Kanye West

El motivo de su discusión fue que el rapero quería mudarse junto a toda su familia a un rancho en el estado de Wyoming, pero ella se negó. "Él debería tener una mujer que apoyara todos sus movimientos y viajara con él, pero yo no puedo. Siempre pensé que podría quedarme con mis niños y que mi marido se fuera moviendo de un estado a otro, pero luego me di cuenta de que no, que no había llegado tan lejos para no ser feliz", apuntó Kim a sus hermanas.

Y es que esa discusión pareció ser el detonante de su relación, pues luego le dijo a sus familiares que "no viviré con eso, peleándonos todo el tiempo como si fuera una constante". El último año había sido de lo más complicado, y ya no podían más: "Quiero ser feliz".

Solo un mes más tarde, la pareja anunció su divorico de manera oficial, aunque de momento no han firmado los papeles, teniendo que acordar la custodia de sus cuatro hijos, North, Saint, Chicago y Psalm y el reparto de su fortuna, la cual supera los 2.000 millones de euros y cuatro mansiones.