Beatriz Montañez y la falta de sexo en su retiro: "A no ser que te gusten los árboles..."
La presentadora, que lleva años viviendo aislada en mitad de un bosque, ha contado más detalles sobre su peculiar estilo de vida y las cosas que echa de menos.
Tras varios años totalmente desaparecida del foco público, Beatriz Montañez, conocida por su trabajo en 'El Intermedio' junto al Gran Wyoming antes de la etapa de Sandra Sabatés, regresó a la primera línea mediática la pasada semana. La presentadora y guionista ha escrito su primer libro, 'Niadela', en el que relata su propia experiencia viviendo durante un lustro en una casa de piedra en mitad de un bosque, sin la mayoría de comodidades de la vida moderna.
Y es que Montañez decidió dar un giro radical a su vida después de dejar 'El Intermedio' y cambió los ritmos de la ciudad por una forma de vida recogida, en estrecho contacto con la naturaleza. Mañana, no obstante, volverá a 'El Intermedio' para celebrar los quince años de vida del programa. Y antes de este aniversario tan especial, La Sexta ha emitido un breve reportaje en el que se muestra a Montañez en su rutina diaria en el bosque.
La presentadora ha explicado cómo se maneja para cubrir las necesidades básicas: corta su propia leña en las inmediaciones de su casa, calienta el agua para poder lavarse y estuvo durante año y medio utilizando velas para iluminar su hogar. "Tenía un trabajo que todo el mundo hubiera pensado que era maravilloso y una vida que vista desde fuera podía parecer idílica, pero dentro había algo que no estaba funcionado", ha reflexionado.
Pese a que el contacto constante con el entorno natural le resulta más que suficiente para no sentirse sola, Montañez ha reconocido que sí que hay algunas cosas que añora. "Todavía soy joven y aquí no hay sexo... a no ser que te gusten mucho los árboles", admitió entre risas, señalando que "sí que es verdad que echas de menos el contacto con la piel de otra persona".
Y aunque ha dejado más que claro lo contenta que se siente con su vida de ahora, la presentadora ha tenido que sobrellevar situaciones duras. "Cuando creía que lo sabía todo y que era tan estúpida como para creer que era lo suficientemente inteligente como para poder valerme sola, empecé a coger hierbajos y caí enferma grave cuatro días", ha referido.