PROTESTAS CONTRA EL RACISMO

Ricky Martin se considera "una amenaza" para los EEUU por ser "latino y homosexual"

El cantante puertorriqueño se ha pronunciado sobre la delicada situación que se ha generado en el país en el que reside a raíz de la muerte de George Floyd.

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Ricky Martin se considera "una amenaza" para los EEUU por ser "latino y homosexual"

La convulsión social que ha provocado en Estados Unidos la muerte durante custodia policial de George Floyd continúa ocupando las portadas de los medios y está llevando a que muchas figuras de relevancia pública se manifiestan con rotundidad contra el racismo y la discriminación a las minorías, mostrando sin ambages su apoyo a la causa.

En el caso de Ricky Martin, más allá de la solidaridad, existe además una identificación directa con el motivo de las protestas. El artista puertorriqueño, afincado en Miami desde hace muchos años, ha dado su opinión sobre lo que está sucediendo en Estados Unidos y sobre su propia experiencia personal como extranjero y homosexual. Lo ha hecho en el programa televisivo Suelta la sopa. "Soy un hombre latino, homosexual y casado con un hombre árabe. Viviendo en los Estados Unidos. Soy una amenaza para esta gente, lo veas por donde lo veas", ha declarado (el cantante está casado con el artista sirio Jwan Yosef).

Además, Martin también ha confesado que su visión sobre estas problemáticas sociales se ha ido transformando con el tiempo. "No crecí pensando que Estados Unidos era así. Pero Estados Unidos era así. Lo que pasa es que ahora tenemos cámaras y lo vemos. Ahora nosotros como ciudadanos prendemos el teléfono, grabamos la injusticia y nos enojamos. Ahora lo estamos viendo", ha reflexionado.

El intérprete es consciente de que, pese a tener que lidiar con los prejuicios sistémicos, su situación es privilegiada. "Yo vivo esto todos los días, no tan expuesto porque vivo aislado, en mi casa, tranquilo, yo voy de aquí a mi trabajo, del trabajo vuelvo a casa. Pero vivimos aquí, escuchamos las historias, sentimos", ha manifestado, especificando que, para ellos, hasta el hecho de pararse a tomar un café "puede ser peligroso".

En cuanto a cómo ha ido siguiendo las noticias de estos últimos días, el puertorriqueño ha revelado que su marido y él han tratado de alejar a sus hijos de la televisión lo máximo posible. "Yo sí me mantengo informado porque tengo que saber lo que está pasando. Pero creo que ha sido una gran terapia alejar a los niños de la pantalla", ha contado, "aunque ellos no estén viendo televisión, están escuchando lo que está saliendo. Para mí ha sido bien importante, para mi cicatrización de una manera u otra, alejarme un poco".

Y para rematar su intervención, el cantante quiso hacer un emotivo alegato final: "Hay que hablar del amor: no importa a quién ames, no importa de dónde vengas, tu estrato social, tu color de piel... ¡Me enferma tener que estar hablando de esto! Parece mentira que tengamos que estar hablando de esto en el 2020 en Estados Unidos".