FAMILIA

Adara revela un traumático episodio de su pasado: "Tenía tanto pánico"

La exganadora de 'GH Vip' se ha confesado sobre una dolorosa vivencia de su infancia relacionada con la expareja de su madre Elena.

Adara revela un traumático episodio de su pasado: "Tenía tanto pánico"

Desde que saliera de la casa de Guadalix de la Sierra convertida en ganadora de la última edición de 'Gran Hermano Vip', Adara Molinero se ha convertido en una auténtica estrella mediática y su presencia en programas y portadas no deja de acrecentarse. Tras su ruptura con Gianmarco Onestini, la joven ha dedicado sus fuerzas a apoyar en los platós a su madre, Elena, concursante de 'Supervivientes'.

Y aunque la relación entre las dos mujeres parece estar hecha a prueba de bombas, lo cierto es que ambas han tenido sus roces y desencuentros públicos, y no todas sus memorias juntas son positivas. Elena, de hecho, protagonizó uno de los momentos más desgarradores del reality de supervivencia cuando se confesó sobre sus culpas y arrepentimientos vitales en el puente de las emociones. Y ahora, Adara ha abierto la puerta a otro episodio familiar oscuro.

En una entrevista exclusiva con Lecturas, la joven ha narrado con detalle cómo fue convivir de niña con el que era por entonces el novio de su madre. Un hombre hacia el que Adara y su hermano sentían terror y al que hace en parte responsable de que su infancia quedara destrozada. Y es que cuando la exconcursante de 'GH Vip' tenía solo 8 años sucedió algo que la dejaría marcada para siempre.

“Estábamos jugando y como cualquier niño gritábamos", ha recordado en la entrevista, "nos castigó sin jugar. Fíjate, castigar a un niño a que no se ría, ni juegue. Nos puso a cada uno en un sofá, estábamos con una revista y la tiré, me reí y me soltó un guantazo". El golpe fue tan fuerte que, según ha revelado Adara, le dejó la señal de la mano impresa en la mejilla: "Me pegó tal hostia que me llevaron al médico".

"Lloré mucho, pero tenía tanto pánico...", ha confesado la madrileña, que a lo largo de este viaje al pasado no pudo evitar verse sobrepasada por la emoción. El escalofriante episodio propició, debido a las marcas que se le quedaron en la cara, que el padre de Adara se enterara finalmente de lo que estaba sucediendo en la casa de Elena.