Madame de Rosa, la influencer que volvió a trabajar de enfermera, da positivo

La batalla contra la expansión del coronavirus tiene varios frentes, pero el más importante y peligroso es aquel en el que se encuentran los trabajadores del sistema sanitario. Médicos, enfermeras, celadores y el resto del personal empleado en los hospitales han estado en las últimas semanas volcados día y noche en la lucha contra la enfermedad. Un esfuerzo titánico con un coste elevado: hace unos días, Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, informaba de que el 12% de los casos positivos confirmados eran trabajadores de la salud.

El alto riesgo que corren estos héroes y heroínas a pie de calle encuentra un ejemplo paradigmático en la historia de Madame de Rosa, una conocida influencer española que hace unas semanas recabó mucha atención mediática al anunciar que había decidido sumarse a la lista de profesionales sanitarios que luchan contra la enfermedad.

Y es que Ángela Rozas, verdadero nombre de esta instagramer especializada en moda y con más de medio millón de seguidores, se dedicaba a la enfermería antes de convertirse en una estrella de las redes sociales. Y la joven no dudó en enviar su currículum al Hospital Universitario La Paz, desde donde la respondieron enseguida para que se incorporara cuanto antes.

Pero ayer, una semana y media después de haber retomado su antigua profesión, Rozas ha comunicado a través de Instagram que ha dado positivo por coronavirus. En un vídeo grabado justo después de salir del hospital, la influencer empezó explicando que había contraído la enfermedad pero que se encontraba relativamente "bien". "Estoy con fiebre, me cuesta respirar, estoy con dolor de cabeza y todo eso", manifestó.

La joven hizo este primer anuncio con templanza, pero después no pudo evitar romperse: "Pero sobre todo me siento psicológicamente un poquito abatida porque no puedo evitar sentirme culpable, porque tengo la sensación de que he cometido alguna torpeza", se confesó sin poder contener las lágrimas.

Rozas mostró su disgusto por no no poder ir a ayudar al hospital en un tiempo y contó también que su hijo Romeo también estaba presentando síntomas. "Siento que le he expuesto", declaró muy conmocionada, antes de añadir que lo único que quiere ahora es "recuperarse pronto para volver al hospital y ayudar". La influencer acompañó el vídeo de un comentario en el que comunicaba lo siguiente: "No os preocupéis estoy bien y saldré pronto para seguir luchando en esta batalla. Os quiero".

Hace solo unos días, en una conexión en directo con el programa 'Viva la vida' a través de la cual contó cómo estaba siendo su experiencia en el hospital y cómo se encontraba la situación sanitaria, Rozas confirmó que "las cifras de los sanitarios que están cayendo son muy altas" y aseguró lo siguiente: "Tengo en la cabeza que es prácticamente imposible no contagiarse".