Antonio Montero confiesa que le han quitado un tumor maligno

Antonio Montero ha desvelado este miércoles en 'Sálvame Naranja' que ha tenido que ser operado de un tumor maligno que se encontró él mismo. El periodista desveló que ocurrió el pasado verano en la playa, cuando descubrió un bulto en su pierna mientras se echaba crema protectora al que en un primer momento no le dio importancia. "Pensé que me había dado un golpe", explicó.

"Al cabo de una semana vi que eso seguía ahí. Eso fue en junio y hasta que no volví en septiembre a Madrid no fui al médico. Estando en urgencias con un familiar mío por otra cosa, aproveché y pregunté, me lo vio un médico, me hicieron una resonancia y me dijeron que no sabían qué era", continuó relatando. "Me puse en contacto con mi traumatólogo y me dijo que había que quitarlo. Me hablaron de hacer una biopsia. Me quitaron el bulto, era como una pelota de tenis que estaba metida en el muslo. Seguí viniendo al programa, y a los 15 días fui a quitarme los puntos y en lugar de estar allí mi médico estaba el director del hospital con mi oncólogo".

El diagnóstico para entonces era claro: un tumor maligno. Sin embargo, el periodista asegura que no tuvo miedo a ningún momento ante una posible muerte: "Tenía un bulto grande en el músculo sartorio. En ningún momento tuve miedo, era yo el que calmaba a mis médicos. Si la tengo que palmar la palmo, mi muerte no me preocupa porque Dios me va a perdonar", detalló.

El 28 de febrero, los resultados

Ante la psicóloga Cristina Soria, Montero ha explicado que se ha sometido a sesiones de radioterapia y que tendrá que esperar hasta el próximo viernes para conocer los resultados. Pese a la gravedad de la situación, el colaborador de 'Sálvame' quiere mandar un mensaje de tranquilidad y alejarse de los dramas: "Cero drama (...). Mi entorno lo ha vivido bastante bien. No ha habido drama. Marisa (su expareja) sí, un poco preocupada. Seguramente es la que más. Pero mi familia es muy positiva, mis padres, mis hermanos... Todos son muy positivos", comentó antes de confesar que está preparado para la muerte.

"Mi fe (en Dios) es total. Muchas veces he pensado eso de 'si tengo que palmar, palmaría contento'. Mi vida ha sido la pera, he sido superfeliz. Se me ha agriado un poquito el carácter y salto con más facilidad, pero creo que es más por la edad que por esto. Tengo todo atado hace mucho tiempo, el testamento lo hice cuando era joven. Estoy preparado cada minuto de mi vida para palmarla", concluyó.