Condenado por darle pasteles con viagra a su jefe
El hombre comió de los dulces de su trabajador sin saber que estaban cargados con hasta 30 pastillas de Sildenafil. Tuvo que ser ingresado.
Benjamin Chope quiso hacerle una broma a su jefe con motivo del April Fool's Day (similar al día de los Inocentes en el mundo anglosajón). Para ello, acudió a su puesto de trabajo en una tienda perteneciente a una cadena de supermercados en la localidad inglesa de Newton Abbot. Allí le ofreció comer unos pasteles que había preparado y que estaban cargados con hasta 30 pastillas de viagra repartidas en los ocho dulces.
La broma se fue de las manos y tras comer varios de los dulces ante la insistencia del empleado, Daniel Webber, el jefe de Chope, tuvo que ser ingresado en un hospital cercano. Pese a ser una fecha señalada en el calendario británico, Webber no sospechó ya que su empleado solía llevar pasteles caseros de forma habitual.
Pese a que Webber no sufrió secuelas tras lo sucedido, el caso acabó en los juzgados. "15 minutos más tarde empezó a sentirse significativamente indispuesto", explica el sumario sobre la situación de Webber tras comerse el obsequio. La víctima permaneció hasta 10 horas ingresada en el hospital.
El juez ha condenado a Benjamin Chope a 80 horas de trabajo sin remuneración y a 12 meses de voluntariado, con el objetivo de que la sentencia le haga madurar, según afirmó el magistrado.