El vendaval Halep expulsa a Sorribes de la Caja Mágica

Simona Halep volvió a tocar tierra en Madrid dos años después. Este viernes derrotó a Sara Sorribes (6-0 y 7-5 en una hora y 24 minutos) en su estreno en el Mutua, un torneo que ya ganó en 2016 y 2017. Fue un partido en el que Sorribes, que afrontaba la cita con el mejor ranking de su carrera (46ª), mostró dos caras ante la tercera cabeza de serie y número tres de la lista, una inquilina habitual de la pista Manolo Santana.

La doble falta con la que arrancó fue presagio de lo que estaba por venir en el primer set: tres roturas en contra y seis juegos seguidos para un rosco en el primer set de la rumana, que entró al partido con mucha intensidad, golpeando profundo y acortando unos intercambios que sabía que no le beneficiaban ante una jugadora muy contestataria.

La segunda manga fue otra historia. Sorribes consiguió conectar sus primeros golpes ganadores para devolver una nueva rotura de salida, pero el amago de reacción fue rápidamente aplacado con dos breaks consecutivos de su rival. Cuando todo el pescado parecía vendido, se sacó de la manga una rotura para el 5-3, salvó dos bolas de partido en contra para el 5-4 y sumió en un mar de dudas a Halep, que entregó de nuevo su saque a continuación. Pero la rumana ya tiene mucho callo en estas lides y supo recomponerse con dos juegos seguidos, uno al resto y otro al servicio, para sentenciar el pulso.

Segunda derrota pues en el cara a cara particular de Sorribes contra ella (la primera fue en Roland Garros el año pasado), que llega a la cita con la racha activa más larga de semanas en el top-10 mundial, 359. "Gracias a todos por venir. Ha sido una gran diferencia con otros torneos que hemos vivido últimamente. Ha sido una gran atmósfera. Esto es como mi segunda casa", afirmó la de Constanza, ya superado el primer escollo en sus aspiraciones de conseguir el décimo título de su carrera sobre polvo de ladrillo. El próximo será la china Zheng, que tumbó a la polaca Linette (6-2, 3-6 y 6-1).

"Me ha dado una lección"

"Simona me ha dado una lección. Ya sabía que tengo muchas cosas que mejorar, pero me lo ha recordado. Decepcionada no estoy. Sí un poco triste, pero intento coger la parte buena: que es mejor que yo y que tengo que mejorar para parecerme lo más posible a ella", aseguró Sorribes. "En mi mejor momento he estado a punto de perder 6-0 y 6-1. Es una realidad. No estoy para ponerme ningún ranking. Tengo que trabajar e intentar jugar el máximo número de partidos posibles a este nivel", añadió. También habló de la burbuja a la que se han tenido que someter todos los tenistas para evitar contagios: "Es más difícil aquí, porque están tus seres queridos a cinco metros y no puedes ir a darles un abrazo. Si estás lejos eso no te pasa". Pese a la derrota, valora muy positivamente su 2021 hasta la fecha: "Es un año muy bueno. Estoy feliz con mi temporada y los resultados. Mi nivel va creciendo y de eso se trata".