Nicola Kuhn, un campeón del futuro moldeado por Ferrero
El alicantino de 19 años, reciente ganador del Máster Futuro Nacional Mapfre, se formó en la academia del exnúmero uno y fue subcampeón de Roland Garros Júnior.
A Nicola Kuhn le dieron una raqueta con seis años. Empezó a entrenar en Torrevieja y 13 años después es campeón del Máster Futuro Nacional Mapfre y una de las promesas más firmes de un tenis español necesitado de nuevos referentes ante la retirada de jugadores como Ferrer y los 33 años que suma ya Rafa Nadal.
Nacido en Austria en marzo de 2000, Kuhn es de padre alemán y madre rusa, Rita, con la que se sentaba a ver a Boris Becker y Steffi Graff en la televisión, costumbre dejó impronta en el chaval. De los 6 a los 12 se entrenó en el Club de Tenis de Torrevieja. Allí se proclamó campeón de España e internacional en categoría sub-12.
Buenos resultados que le valieron un salto a la academia de Juan Carlos Ferrero, exnúmero uno del mundo y campeón de Roland Garros en 2003. Moldeado por el valenciano, fue subcampeón del mundo en Les Petit As en 2014 y campeón de España ese mismo año. Un año después ganó sus dos primeros torneos de la Federación Internacional, los ITF de categoría 4 y 5 de Shenzhen (China), y fue MVP de la Davis Júnior en la Caja Mágica de Madrid, cuando aún jugaba para Alemania en torneos por equipos.
En 2016, ya nacionalizado, ganó dos torneos ITF más y en 2017 salió de la academia de Ferrero para volver con el argentino Pedro Caprotta, el entrenador de sus comienzos. Siguió progresando, con el título en dobles de Roland Garros Júnior y el subcampeonato en individuales como momentos estelares de esa temporada.
Dos años después ya ha jugado y ganado en el circuito ATP (incluida la categoría Masters 1.000) y este año se ha agenciado el Challenger de Castilla y León antes del triunfo en el Máster Futuro, celebrado en la academia de Nadal en Manacor, este sábado.
Políglota (habla alemán, inglés y ruso con fluidez además del castellano), es aficionado a los coches, los perros, la música, el cine, la pesca y el golf. También al Betis, aunque ni por orígenes ni por residencia cuadre. Así es él, variopinto y con futuro por delante.