Nadal: "Pasé momentos críticos al final del segundo set"
Nadal avanzó hasta las semifinales tras derrotar a Schwartzman. Tuvo "problemas de estómago" antes del partido, y durante el mismo sufrió "deshidratación y calambres".
Rafa Nadal ya está en las semifinales del US Open tras derrotar, en tres sets (6-4, 7-5 y 6-2) a Diego Schwartzman en casi tres horas de partido. El día en Nueva York estuvo muy húmedo y eso, junto con la dureza del partido, pasó factura al español. Necesitó asistencia médica en dos ocasiones por calambres en sus brazos y en la entrevista posterior fue claro: sufrió. “Al final del segundo set y al inicio del tercero pasé momento críticos por el físico. Después, logré volver a recuperar sensaciones. Estoy bien, no es nada importante”, tranquilizó el de Manacor.
El duelo ante Schwartzman fue duro en el plano físico y mental. “Cuando me remontó los dos breaks del primer asalto, fue duro”, reconoció. Pese a todo, el español se mostró muy feliz por estar a un paso de la final. “Los partidos ante Cilic y este ante Schwartzman me han dado mucha confianza. Mañana descansaré para recuperarme para las semifinales”, concluyó. En esa ronda le espera el italiano Matteo Berrettini.
En la rueda de prensa, Nadal aclaró que había sido "un día pesado, complicado para mantener puntos largos". "Me he deshidratado y he tenido un problema de estómago dos horas antes del partido. Y el resto no ayudaba. Sentía que podía pasar lo que ha pasado", dijo, y luego reconoció que su "gran fallo" había sido "el segundo set". "En el primero hubo un fallo también, pero en los primeros cuatro juegos jugué probablemente mi mejor tenis en el torneo. Luego hice un juego malo. Me faltó autoridad con el servicio y no cogí el ritmo de juego. Se me hizo difícil salir de posiciones defensivas contra un jugador que tira bolas rasas y largas".
"Al final fue un partido muy duro, pero lo gané en tres sets, con dos breaks en cada uno", explicó, antes de hablar de profundizar sobre sus problemas físicos: "Me deshidraté y me acalambré. Tuve acumulación de tensión y al final del segundo aparecieron calambres. Primero en las manos, un dedo no se doblaba; luego en el codo derecho, el flexor se quedaba doblado, no podía estirarlo. Tomé sal y bebidas isotónicas y terminé jugando bien". Nadal afirmó que tenía "una buena sensación por haber tenido la capacidad de aceptar las cosas y convivir con los problemas. Había que ganar de la manera que fuera. Tuve fallos técnicos no mentales, la mentalidad fue positiva".