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ROLAND GARROS

Roland Garros, con nuevo ‘look’ a falta de cubrir la Chatrier

El complejo que alberga el torneo ha sufrido varias reformas y se ha construido un estadio nuevo. Las obras de la central han costado 380 millones de euros.

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Roland Garros, con nuevo ‘look’ a falta de cubrir la Chatrier
CHRISTOPHE ARCHAMBAULTAFP

Roland Garros, el único Grand Slam que se resistía a adaptarse a los cambios que ha experimentado el mundo del tenis en los últimos años, inició en 2018 una serie de obras esenciales cuyos resultados pueden apreciarse ya en la edición de 2019 que arranca hoy.

El torneo parisino luce nuevo aspecto con algunas novedades importantes, como la reforma de la pista central, una Philippe Chatrier más moderna que puede albergar ahora con más comodidad y visibilidad a 15.000 espectadores y que en 2020 tendrá un techo retráctil que pesa la mitad que la torre Eiffel. Eso permitirá que se juegue por primera vez en ella en sesiones nocturnas y aunque llueva. Tras la final del año pasado se demolió parte de la estructura y construyeron debajo nuevas dependencias para los jugadores. Y la sala de prensa se trasladó provisionalmente al edificio del museo. En total, la inversión alcanza los 380 millones de euros.

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PHILIPPE LOPEZAFP

Además, la nueva pista ­Simmone-Mathieu, donde hoy debutará Muguruza, está ahora totalmente operativa en los jardines de Serres d’Auteuil. Es la tercera con más capacidad (5.000) del complejo, tras la Chatrier y la Suzanne-Lenglen (10.000). El Fondo de los Príncipes, donde están algunas de las nuevas canchas secundarias de juego y de entrenamientos, es ahora más accesible al contar con un pasillo mayor y una nueva entrada. Además, en 2021 se derribará la vieja pista 1 para agrandar la Plaza de los Mosqueteros, el principal centro de reunión de los aficionados.

Nadal, que ya se ha entrenado en la nueva Chatrier, contó sus experiencias: “Solo noté el cambio en el color de las sillas y los cristales en los fondos”, bromeó. “A nivel de juego no sentí ninguna diferencia. El viento sigue entrando igual, la sensación de pista inmensa, de ver todo muy ancho es la misma, al igual que el golpeo de la bola, no vi que hiciera un ruido diferente”, concluyó.