Muguruza recupera el modo Grand Slam y funde a Zhang
La española, que había generado dudas desde Roland Garros y no está haciendo una gran temporada, se quitó los nervios del estreno en la pista 17.
Garbiñe Muguruza se presentaba en Nueva York casi sin preparación en pista dura (apenas jugó un partido en Cincinnati y lo perdió con Lesia Tsurenko) y entre dudas por su irregularidad desde que fuera semifinalista en el pasado Roland Garros. El año, en general, no está siendo bueno para la española, pero en el US Open se puso justo a tiempo en modo Grand Slam para arrasar a la china Shuai Zhang, que le puso algún problema en el primer set antes de claudicar por completo en el segundo: 6-3 y 6-0 en 77 minutos.
Por su reciente trayectoria y su descenso en el ranking, desde el número dos con el que empezó 2018 hasta el doce que ostenta ahora, no recibió la consideración de favorita por parte del torneo estadounidense. Por eso no participó en el media day y su estreno tuvo lugar en la pista 17, la cuarta en importancia. El hecho es que salvo su actuación en París y el título que conquistó en una plaza menor, Monterrey, la temporada podría considerarse más bien negativa para Garbiñe, eliminada en las segundas rondas de Australia y Wimbledon. Jugó la final en Doha y las semifinales en Dubai en lo que pareció ser un buen arranque de curso. Pero después alternó buenos resultados con batacazos sonados. Y unas molestias en el brazo derecho le hicieron renunciar a San José y Montreal. Luego llegó la derrota en Cincinnati, en la que se le vio angustiada, antes de plantarse en Flushing Meadows.
Muguruza, que siempre ha demostrado que se motiva más en las grandes citas, recuperó muchas de las virtudes de su juego para volver a confiar en sus posibilidades en un día en el que por su lado del cuadro se fue a la calle la número uno, Simona Halep (perdió contra Kaia Kanepi por 6-2 y 6-4), y sufrió otra aspirante, Elina Svitolina (6-3, 1-6 y 6-1 ante Vickery). Con 20 golpes ganadores, 14 errores no forzados (pocos para los que acostumbra a sumar) y buenos saques en momentos comprometidos, la caraqueña dio buena cuenta de Zhang y ahora le espera una rival teóricamente inferior: la checa Muchova (22 años y 179ª del mundo).
“Estoy contenta por la victoria, porque no he jugado mucho este verano. Pero no doy nada por sentado. Iré paso a paso”, dijo ayer Garbiñe, prudente y contenta con su papel secundario: “Trato de no crear muchas expectativas. Estoy un poco en la sombra y eso me hace feliz”.