Ferrer acaba con la aventura de su amigo Gimeno-Traver

Además con este triunfo, Ferrer saldrá del torneo de Nueva York como ''top-ten'', puesto que con los puntos ya sumados adelanta a sus dos predecesores en la clasificación de la ATP, el francés Jo Wildred Tsonga y el argentino Juan Martín del Potro, que no han participado en Nueva York por lesión.

El jugador alicantino se impuso por 7-6(2), 6-2 y 6-2, en un encuentro que estuvo muy igualado en el primer set, pero en el que luego Ferrer se impuso con claridad y autoridad. Como había avanzado Gimeno-Traver en la previa, el hecho de haberse entrenado ambos tanto tiempo juntos provocaba que el partido se convirtiera en una batalla psicológica y así fue, al menos en el primer set.

Los dos trataron de amarrar sus servicios y esperar la oportunidad de romper el del rival y el partido entró en una dinámica de igualdad por lo que tuvo que decidirse en la muerte súbita. Ahí, pesó la mayor experiencia de Ferrer en estas lides y el alicantino se llevó el parcial por 7-2.

Tras apuntarse el primer set, Ferrer jugó más suelto y Gimeno-Traver comenzó a incrementar sensiblemente su porcentaje de errores no forzados, lo que llevó a un rápido desenlace de la segunda manga en media por 6-2.

Ferrer tenía el partido en el bolsillo y no lo dejó escapar. Con un juego muy compacto, sin apenas cometer errores y atacando cuando debía, fue sumando juegos ante un rival que intentaba sin éxito variar la dinámica de un partido que acabó llevándose el de Jávea con facilidad por un nuevo 6-2, en 1 hora y 54 minutos.

En octavos de final, David Ferrer, semifinalista en Nueva York en 2007, se medirá con el vencedor del partido entre Fernando Verdasco y el argentino David Nalbandian.

Ferrer: "Volver a estar entre los top-ten es un regalo que no me esperaba"

"Llegar a ser un ''top-ten'' está difícil, es muy complicado y para mí es un regalo porque, si soy sincero, no me esperaba ni estar cerca, pero lo he conseguido. Hubo gente que dijo que no volvería a estar ahí, pero la vida a veces te da una segunda oportunidad para volver", explicó.

Tras superar a su amigo Daniel Gimeno-Traver en tercera ronda, el próximo rival al que se enfrentará es Fernando Verdasco, del que dijo que en este tipo de superficies es favorito. "El favorito ahora mismo es Fernando, porque creo que en pista rápida juega mejor que yo. Cuando juego contra Fernando, creo que depende más de cómo esté él, es un grandísimo jugador y depende de cómo esté tenísticamente", indicó.

"Fernando siempre es un rival muy difícil y complicado porque tiene mucha calidad. Siempre hemos jugado partidos muy duros y va a ser un partido muy importante para los dos, porque estamos muy parejos en la ''race''", agregó. Ferrer reconoció que, una vez inmerso entre los diez mejores del

mundo, sueña con volver a jugar la Copa Masters, de la que fue finalista en 2007.

"En un principio no pensaba que pudiera jugar el Masters, pero ahora que estoy cerca es algo que te motiva, mi otro objetivo será intentar acabar el año como top-ten''", concluyó.

Almagro no puede con Querrey

Nicolás Almagro tropezó por cuarto año consecutivo en la tercera ronda del Abierto de Estados Unidos y en esta ocasión no pudo superar al jugador estadounidense Sam Querrey, quien se impuso por 6-3, 6-4 y 6-4, en 1 hora y 53 minutos de juego.

El tenista murciano no se encontró cómodo en ningún momento y no pudo desarrollar su habitual juego, frente a un rival también muy agresivo, que doblegó en puntos ganadores al español, 42 por 21, a pesar de que Almagro es un jugador al que le gusta dominar los partidos.

El servicio, otra de las principales armas del español, tampoco le respondió a Almagro en este encuentro en el que se medía ante otro gran sacador como es el tenista de San Francisco, que está firmando la mejor temporada de su vida, lo que le ha hecho alcanzar el puesto 22 en el ránking.

Almagro no aprovechó ninguna de las cinco bolas de rotura de las que dispuso en todo el encuentro y con ese porcentaje poco pudo hacer ante Querrey, al que le bastó con aprovechar una por set para

llevarse el partido.