Vitor Roque: el Barça en línea Calafat
El Barça ha fichado a Vitor Roque, poderoso delantero del Paranaense. Un movimiento al estilo de la estrategia que Juni Calafat, exanalista de la factoría Maldini, aconsejó en el Madrid, acreditada por el éxito de Vinicius, que pareció muy caro por 45 millones y hoy tiene una valoración de 250. Por la misma vía vino Rodrygo, que parece que ya termina su tiempo en el microondas y rompe también en figura. Algo más contrastado, pues ya estaba en el Oporto, pero aún desconocido aquí, era Militao, que también funciona. Ahora las miras del Madrid están puestas en Endrick, fichado ya, aunque no vendrá hasta su mayoría de edad, en la 24-25.
¿Significa que el Barça copia al Madrid? Podría decirse. La escalada de precios provocada por los clubes que tienen el dinero por castigo obliga a buscar figuras muy jóvenes, en la esperanza de que cuajen en nuevos ‘vinicius’. Pero junto a los éxitos hay una larga lista de pinchazos olvidados: Lucas Silva, Reinier o Jovic, otros que ni sonaron, como Augusto Galván, Pablo Teixeira, Abner, Rodrigo Rodrigues, Sergio Díaz, Varela, Vergos, Peeters, Markkanen y hasta el chino Liangmin Lin, llegados para el equipo juvenil o para el Castilla, y que se atascaron. O casos como Odegaard, Lienhart, que funcionaron tras salir del Madrid, un peldaño más abajo.
No es fácil adivinar qué talentos van a cuajar y cuáles no. En 2019 un estudio de L’Équipe aventuraba los seis jugadores que a su juicio iban a dominar el fútbol inminente y de ellos sólo Ansu Fati se mantiene en la élite, y con apuros. En todo caso, bienvenidas sean estas apuestas por Vitor Roque y Endrick, parecidos en su estatura terciadita pero no tanto en su juego, porque el barcelonista es potente, tipo Ronaldo, y el madridista parece un Romario 2.0. El éxito de Vinicius les avala a ambos y justifica el riesgo de la inversión. Y dejo para otro día a Arda Güler, esa interesante perla turca que llega en la misma línea de fenómeno en ciernes.