Vinicius, menos caritas y más correr

Después de una debacle como la vivida ante el equipo de Luis Enrique señalar individualmente a un futbolista siempre es injusto, pero a los buenos hay que exigirles que saquen su mejor versión cuando lleguen las curvas.

Y de Vinicius hay que esperar muchísimo más. El brasileño necesita recuperar la sonrisa, pero además tiene que empezar a correr más, a ser más solidario y a tener mucha mejor actitud en el terreno de juego cuando las cosas no le terminan de salir.

Sentirse intocable no suele ser bueno para nadie en su profesión y el brasileño tiene que entender que ha venido un nuevo jefe que le va a pedir mucho más de lo que está dando en este momento.

Después de un año duro, el verano le tiene que venir bien para resetear la mente, trabajar el cuerpo y recuperar el hambre que parece que ha perdido desde que no se llevó el Balón de Oro. Basta de excusas y caritas, es tiempo de ponerse a currar.

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