Un verano marcado por ventas millonarias
Estabilidad. Aunque en ese apartado el Atlético de Simeone le gana con creces, no deja de ser noticiable que en un ecosistema tan volcánico como el de los banquillos portugueses, donde los relevos precipitados están a la orden del día, Sergio Conceiçao lleve ya más de cinco años dirigiendo al Oporto. Éste es, de hecho, su sexto curso, y puede presumir de haber ganado tres ligas durante su etapa. La última la logró en el pasado ejercicio, cuando recuperó el trono arrebatándoselo al Sporting. El comportamiento grupal del equipo es la mayor característica de este conjunto, que tiene aprendidos los mandamientos de Conceiçao: agresividad, orden y mucho sacrificio colectivo.
Ventas millonarias en la zona de creación. Pese al éxito reciente, esta temporada se presume complicada. Ya se vio en la derrota ante el Rio Ave (3-1), el resultado que sitúa a los dragones tres puntos por debajo del Benfica. La directiva decidió aceptar ofertas muy altas por sus dos grandes promesas en el centro del campo: Vitinha se marchó al PSG por más de 40 millones y Fábio Vieira al Arsenal por 35. Además, también acabó desvinculándose de forma definitiva Sérgio Oliveira tras su cesión a la Roma: ahora juega en el Galatasaray. Estos traspasos han dejado más corta de calidad y jerarquía a la medular, ya que además los fichajes más importantes no se han realizado para esa zona del campo.
Gabriel Verón, la gran apuesta. La inversión más prometedora del Oporto en el reciente mercado de fichajes -que no la más cara- es la acometida por este extremo brasileño que ha llegado procedente del Palmeiras y que acaba de cumplir veinte años. Se proclamó campeón de la Copa Libertadores en las dos últimas ediciones con la escuadra paulista. Rápido, potente en carrera y habilidoso, este atacante ha llegado para paliar el impacto que causó la venta de Luis Díaz al Liverpool en el último mercado invernal. Aunque por aquel entonces los dragones ya se movieron rápido firmando a Galeno del Sporting de Braga, Gabriel Verón tiene que aportar un puntito más de calidad. La esperanza es sacarle rendimiento durante unos cuantos años y que luego pueda generar una plusvalía en el mercado -han pagado unos diez millones por él-.
David Carmo, la nueva pareja de Pepe. Pero la incorporación más costosa ha sido la de este joven y altísimo central zurdo que militaba en el Braga y que ya ha sido llamado por la selección portuguesa absoluta -aunque sin llegar a debutar-. Carmo tiene 23 años y su traspaso (20 millones fijos y 2,5 en variables) es el más caro de la historia entre dos clubes portugueses, algo que tiene un mérito añadido tratándose de un defensor. Su fichaje se ha realizado para sustituir a Chancel Mbemba, que se ha marchado libre al Marsella, y le proporcionará una dura competencia al español Iván Marcano.
Taremi aporta el gol. El delantero iraní llegó tarde al fútbol europeo, pero le bastó un año en el Rio Ave para convencer al Oporto de que lo fichara. En sus dos primeros cursos en Dragao se ha confirmado como un anotador prolífico -marca un tanto cada dos partidos- y es ya la referencia indiscutible en el ataque de los de Conceiçao.