Un partido no significa nada
Xabi no funciona como en el Leverkusen y seguramente se tendrá que ir antes de lo pensado. Sin embargo, la ruleta rusa a la que será sometido hoy, me parece injusta y contraproducente...
Pues todo apunta a que si el Madrid pierde en Vitoria contra el Alavés, Xabi Alonso no se comerá las uvas siendo entrenador del equipo merengue. No me gusta nada lo que se asemeja mucho a un ultimátum. Eso es lo peor que le puede pasar a cualquier profesional digno y trabajador (¡y el donostiarra lo es sin duda!). Es también lo peor para los jugadores, que serán observados con los ojos de la sospecha y esa pregunta vil, “¿le están haciendo la cama al técnico?”. Cierto es que la situación es muy preocupante y que, como ya lo he escrito, Xabi no funciona en el Madrid como lo hacía en el Bayer Leverkusen y como se esperaba cuando firmó su contrato en la capital de España. Y que seguramente se tendrá que marchar antes de lo pensado. Sin embargo, el juego de la ruleta rusa al que será sometido hoy me parece injusto y contraproducente.
Ante todo, porque un partido por sí solo no significa nada. Y menos todavía cuando se trata de un desplazamiento en el País Vasco, una tierra siempre hostil para el Madrid. ¿Será mejor o peor técnico si gana, empata o pierde? Por supuesto que no. La cuestión es saber si Xabi Alonso vale para el club blanco de hoy, con esta plantilla. Si vale, hay que dejarle tiempo y asumir haberle escogido. Si no vale, la directiva hubiera tenido que detectarlo hace tiempo y echarle, aunque los resultados no fueran malos. Así de simple.
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