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Un Mundial sin las mejores

Algunas de las mejores jugadoras de fútbol no participarán en el Mundial femenino. Las primeras en renunciar fueron las 17 futbolistas de la selección española y la última en hacerlo ha sido Wendie Renard, la capitana y gran estrella de Francia, a la que ya se han unido Diani, Katoto y Morroni. Tiane Endler, considerada como la número uno en su puesto, dejó en el aire su continuidad en la selección chilena que no se ha clasificado para el Mundial poniendo el foco en las condiciones en las que trabajan: “No teníamos más recursos, se dijo hace tiempo y no se escuchó”. Mientras, las integrantes de la selección canadiense, que estaban en huelga, fueron obligadas por su federación a regresar a los entrenamientos y disputar un torneo. Han denunciado que no se las proporciona el mismo nivel de apoyo que a sus compañeros tanto en materia de recursos, estructura y, claro, compensación económica a pesar de su mayor éxito deportivo.

El problema es global, estructural. Futbolistas profesionales apuntando a sus federaciones y rebelándose ante su inmovilismo cuando el diálogo no ha sido posible de la única manera que las queda: renunciando a disputar un Mundial o a volver con sus selecciones. Abandonan sus sueños profesionales ante la imposibilidad de lograrlos con unas condiciones que consideran dignas y el muro de incomprensión con el que se topan cuando lo señalan. Ellas al final terminan siendo consideradas como el problema y despachadas con condescendencia. Son caprichosas, niñatas, poco comprometidas. Sus testimonios y vivencias no son válidos. El sistema debe permanecer tal y como está, caiga quien caiga, y las que se despeñan son ellas.

Todas tienen algo en común: señalan la necesidad de preservar su salud mental y las convierten en un meme, una broma recurrente de señores muy machos para desprestigiarlas. Las están obligando a ser heroínas cuando lo único que querían era jugar al fútbol y es imposible no admirarlas y sentir pena por ellas al mismo tiempo. Un Mundial sin las mejores no es un Mundial.