NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

El primero de 2023. Primer título de la temporada en juego, el título que menor importancia tiene a la hora de poner una nota a final de curso para los dos gigantes de nuestro fútbol, pero que cuando se disputa entre ellos siempre adquiere una mayor dimensión y que puede afectar, sin lugar a dudas, a las dinámicas posteriores. Es evidente que el parón del Mundial a afectado a ambos y que ninguno de los dos parece llegar en un estado óptimo de juego y de confianza.

Asignatura pendiente. Al Madrid le está costando mucho robar la pelota en cualquier altura del campo, si bien lo de la presión en campo rival fue, es, y sigue siendo una de las asignaturas pendientes para Carletto, lo novedoso es que los blancos tampoco están consiguiendo ser sólidos y eficaces cuando se juntan más cerca de Courtois, aspecto que fue fundamental para el éxito rotundo de la temporada anterior. De hecho, la semifinal de la propia Supercopa de la pasada edición, Ancelotti, como posteriormente confirmó con cierta ironía en rueda de prensa, planteó el encuentro con la idea de otorgar el balón al Barça, juntar líneas en propio campo para robar y contraatacar, y de esta manera llegaron los goles y el triunfo del conjunto que dirige el italiano. No hay mucho tiempo para entrenar por lo apretado del calendario y urge recuperar la mejor versión de hombres como Vini, Modric, Alaba, Carvajal y Mendy que, por unas circunstancias u otras no están en el rendimiento top necesario para la inminente visita a Anfield dentro de un mes, donde empieza lo decisivo del curso.

En busca de regularidad. Al Barcelona, por su parte, le está costando mantener una regularidad y un equilibrio dentro de los mismos partidos, alterna minutos de fluidez, velocidad e intención con balón, además de agresividad sin el mismo; con otros de atasco, lentitud y problemas para ser contundentes nivel defensivo, ya sea en transición o en la defensa del área en el centro lateral o en el balón parado.

Un Clásico muy emocional. Un aspecto fundamental será el emocional, el cómo encaren esta final unos y otros. Para el Madrid ganar al Barça siempre es especial y prioritario, pero viene de reinar el curso pasado y no está ante la necesidad inmediata de demostrar grandes cosas. Todo lo contrario que los de Xavi, donde el técnico afronta la posibilidad de ganar su primer título y donde su proyecto necesita estímulos que refuercen su idea y la moral general de plantilla, club y afición.