Un año para volver a ser Carvajal
De nuevo el ligamento cruzado es noticia en el Real Madrid. Ayer le tocó el turno al bravo defensa Carvajal. Visualizando las imágenes en televisión de la desafortunada jugada, el diagnóstico era claro. Lesión grave de la rodilla derecha. Se habló en principio de una lesión del ligamento cruzado; sin embargo, los expertos nos imaginábamos lo que realmente había sufrido una triple lesión de ligamento cruzado anterior, rotura del ligamento lateral externo y rotura del tendón poplíteo, a la espera de que en la intervención quirúrgica no se encuentren otras lesiones asociadas. El llanto tremendo del jugador no se debía la rabia ni al coraje, sino simplemente al gran dolor provocado por la lesiones producidas.
Es una lesión grave tanto desde el punto de vista médico como deportivo. Tendrá que pasar por el quirófano y estará apartado de los terrenos de juego durante toda esta temporada. La rehabilitación en este tipo de lesiones también es mucho más compleja que en una lesión aislada del ligamento cruzado. El nivel de juego que tenía nuestro amigo y admirado defensa tardará mucho tiempo, posiblemente un año, en conseguirlo, si es que al final lo consigue. Le deseamos toda la suerte del mundo.
Es de obligado cumplimiento que toda esta plaga de graves lesiones tiene que hacer pensar a todos los responsables de este deporte en analizar cuáles son las causas reales y buscar el difícil equilibrio del trinomio partidos, entrenamientos y descansos como medidas fundamentales para la prevención de las lesiones. Lesiones que al final terminan en un alto porcentaje de ellas en prótesis a lo largo de sus vidas.