Soy más de ‘Vini’ que de Mbappé

Las máscaras caen. Y todavía más rápido ahora, en la sociedad de la información múltiple que ha invadido nuestro planeta. Recuerdo una llamada que recibí en el pasado mes de mayo cuando una persona muy bien informada me dijo: “Fred, no había nada que hacer, los cataríes han puesto mil millones de euros sobre la mesa para que Mbappé renuncie a su sueño de jugar en el Madrid y se quede en el PSG”. No me podía creer esta cifra. Pero resulta que, hace pocas semanas, en una comida en París otra persona, sin ninguna relación con la primera, me habló del mismo récord de dinero ofrecido a un deportista. Y ahora viene el siempre excelente periódico de información general Le Parisien para anunciar estos 630 millones de euros que cobrará Mbappé en sólo tres años. No son mil millones pero, de momento, se están acercando de manera muy peligrosa. Quizás hasta que se descubran otras promesas de los cataríes.

Por lo menos sabemos que el entorno del delantero francés mintió cuando afirmó que las ofertas del PSG y del Madrid eran similares. Algo imposible porque las nuevas reglas de la Liga, sin hablar del sentido común, no hubieran permitido este derroche. Que no haya venido Mbappé es lo mejor que le ha pasado al Madrid desde que Vinicius aterrizó en la capital de España. Como cualquier madridista que se precie, soy más de Vini que de Kylian.