Siempre se repite la misma historia...
Acaba la liga de fútbol femenino igual que empezó: con un Barça campeón y con las futbolistas pidiendo un salario que les permita vivir del fútbol. Excepto algunas, a las demás, les cuesta llegar a fin de mes. Varios meses después de la puesta en marcha de la liga profesional femenina sigue sin llegarse a un acuerdo sobre el convenio colectivo que debe regular las condiciones de trabajo de las futbolistas. El salario mínimo es lo que provoca el bloqueo de la negociación que enfrenta a la Liga Profesional Femenina y a los sindicatos. La LPFF propone aumentar poco a poco el salario cada temporada, llegando a los 19.000 euros en la 24-25. Los sindicatos no están de acuerdo y piden un convenio de 3 años, en el que en el último se alcancen los 30.000 euros de salario mínimo, así como quitar la parcialidad y que el salario tenga efecto retroactivo. Ambas posturas están por debajo de otros países como USA, donde el salario mínimo según Convenio Colectivo en 2023 es de 36.400 dólares o como Inglaterra donde una jugadora media de la Women’s Super League cobra 47.000 libras al año.
No sé bien por qué, pero en esta liga cada jornada podemos disfrutar de un fútbol más atractivo, a pesar de las condiciones de trabajo de las futbolistas. Creo que nuestra liga evoluciona por la inercia de tener a la mejor jugadora del mundo y al mejor club de Europa, que motiva al resto para intentar estar a su altura. Un Barça que posiblemente vuelva a alzarse con la Champions en dos semanas, siendo un escaparate engañoso de lo que es el fútbol en nuestro país.
No todos los equipos que conforman la Liga son el FC Barcelona. Hay clubes que tienen problemas económicos para pagar a sus jugadoras o incluso para desplazarse a los campos cada jornada. Las jugadoras pueden estar metidas en un bus once horas, jugar y sentarse otras once de vuelta y volver a competir en unos pocos días. Ahora mismo existen muchas diferencias entre lo que ofrece la patronal y lo que quieren algunos sindicatos. La pasada jornada fue la última y ya se vio el descontento de algunas jugadoras como las de la Real Sociedad y las del Real Madrid que posaron para la foto en Zubieta tapándose el parche de la competición. Quién sabe si cuando empiece de nuevo la Liga en unos pocos meses se habrá llegado a un acuerdo o habrá que retrasar la primera jornada de liga como ocurrió la temporada pasada. De momento, Carpe Diem y a disfrutar de la Copa de la Reina.