¿Qué debería fichar el Real Valladolid en el mercado invernal?
Antes del parón, Pacheta dejó caer que le gustaría reforzar al Real Valladolid con un mediocentro defensivo y con un delantero de perfil completamente distinto a los que ya existen en la plantilla. Dos o tres cambios de jugadores para ser mejor equipo y alcanzar el objetivo de la permanencia deben darse cuanto antes. El técnico burgalés quiere quedarse con lo que le funciona y ver la posibilidad que le ofrece el mercado de invierno para intentar hacer alguna operación.
Nunca el mercado de fichajes de enero ha tenido tanta relevancia como el de este 2023. En primer lugar, en lo global, porque el parón de mes y medio por culpa del Mundial de Qatar hace que las negociaciones propias de época de mercado se abran en noviembre y desde que pararon las competiciones no se habla de otra cosa. El Real Valladolid debería plantearse revisiones de contrato a la baja de algunos jugadores que no están dando el nivel esperado para aligerar masa salarial e incluso rescisiones de contratos de futbolistas cuyo rendimiento no está a la altura de la Primera División como es el caso de Juanjo Narvaéz. Es decir, lo ideal sería fichar a los futbolistas que hacen falta para mejorar ciertas posiciones y soltar a los que juegan menos. Ya se hizo la temporada anterior con Diogo Queirós, cuando el club blanquivioleta y el Famalicao llegaron a un acuerdo para concluir la cesión del central por falta de minutos. Sería interesante reforzarse adecuadamente en las próximas semanas invernales, con algún futbolista, que mejore la base de la temporada anterior, clave para que el Pucela mantenga la categoría.
Esperemos que Fran Sánchez tenga mejor olfato en este difícil mercado que el que tuvo en verano y acierte en sus decisiones. De nada le serviría al Real Valladolid traer futbolistas veteranos libres como Sergio Asenjo o Escudero, cuyos mejores 100 partidos ya los han jugado con otros equipos. No hay nada más duro para un futbolista que no poder jugar al mismo nivel que la gente lo recuerda, pero la culpa nunca será del jugador, sino del quien lo firma. Hacen falta dos o tres pinceladas que mejoren el cuadro que ya tiene Pacheta medio pintado en una dinámica muy positiva, sobre todo, en los partidos como local. Fichar, si se puede, para mejorar el equipo en las posiciones que demanda el entrenador y no fichar por fichar. Y yo siempre soy participe de mirar hacia abajo y ver si algún futbolista del Promesas o del juvenil está llamando a la puerta del primer equipo. Tenemos los casos de Iván Fresneda y de Lucas Rosa, sobre quienes el mismo Pacheta ya ha afirmado que son futbolistas para competir en Primera División y que ya no bajarán al Promesas. ¿Casualidad? ¡No lo creo! Quizás ese mediocentro defensivo y ese delantero que necesita Pacheta para mejorar el primer equipo se encuentren en las categorías inferiores del Pucela.
Este parón por el Mundial de Qatar le ha venido muy bien a muchos equipos como Elche, Sevilla, Celta, Espanyol... con una dinámica de juego y de resultados muy negativa que llevaba de cabeza a varios de ellos a la Segunda División. Ahora es como si comenzara una temporada nueva y así se lo tomarán estos equipos: borrón y cuenta nueva con entrenadores nuevos, en muchos casos, y refuerzos en materia de fichajes para encarar la vuelta tras el parón. Al Real Valladolid no le ha venido bien este parón; lo único positivo es que Pacheta recuperará a algunos futbolistas lesionados y sobre todo, al brasileño Robert Kenedy, fichado para ser la estrella y el futbolista diferencial y quien, debido a sus continuas lesiones y al bajo estado de forma con el que llegó, aún no ha podido demostrar la calidad que atesora. Un melón por abrir, como se dice comúnmente, que ojalá salga dulce y para degustar ya en el primer partido tras el parón, frente al Real Madrid, el viernes 30 de diciembre, a las 21:30 en el José Zorrilla.