Nunca digas nunca jamás
Sólo un equipo, el Real Madrid, ha ganado tres Champions de manera seguida.


En el deporte, y en la vida, son muchas las ocasiones en las que pensamos que es imposible alcanzar metas que creemos inigualables. De las 11 primeras ediciones de la Copa de Europa, entre 1955 y 1966, el Real Madrid ganó seis, cinco de forma consecutiva. El incremento del número de partidos y participantes, su mayor potencial y la igualdad entre los clubes hacía impensable que, con el nuevo formato de la Champions desde 1992, ningún equipo pudiera volver a conseguir una hazaña semejante. Baste recordar, para valorar la dificultad, que nadie, con una excepción, ha conseguido vencer en dos años seguidos en Champions. Solo un equipo, el Madrid lo ha logrado, y lo consiguió en tres años seguidos. Además, volvió a lograr la misma gesta de alzar el título seis veces en once años, entre 2013 y 2024.
Marc Márquez está a punto de igualar el número de campeonatos del mundo en la máxima categoría de motos logrados por Valentino Rossi, siete, y quedar solo a uno de los ocho de Agostini. Es también el segundo con más victorias conseguidas, 72, a 17 de Valentino. Este año está consiguiendo registros que parecen inigualables, como los siete dobles triunfos, de momento, consecutivos en carrera y en sprint. Hoy disputa el Gran Premio de Cataluña en el circuito de Montmeló, habiendo ganado ayer la sprint (14 de 15).
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También hoy, en la pista Arthur Ashe de Flushing Meadows, en Nueva York, Carlos Alcaraz disputará la final del Open USA, para intentar conseguir su sexto Grand Slam. Tiene 22 años, muchos por delante para seguir disfrutando, que es lo más importante, del tenis. Djokovic ha ganado 24 Grand Slam, muchísimos, y eso que el serbio tuvo que repartir los títulos, salvo contadísimas excepciones, con otros dos extraordinarios tenistas. Alcaraz, de momento, solo tiene un rival a su altura. El récord de títulos es muy difícil, pero posible, lo que sí parece inalcanzable es ganar en 14 ocasiones un mismo Grand Slam, como ha hecho Rafa Nadal en Roland Garros. Se necesita, además de muchos factores, entre ellos la suerte, ser al menos durante 14 años el mejor en uno de los torneos más importantes del mundo. Soy de los que creen que nunca se volverá a conseguir, aunque no deberíamos olvidar a Sean Connery, la ultima vez que interpretó a James Bond. Nunca digas nunca jamás.
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