Nico Paz se suma a la fiesta

De lo poco que se le puede reprochar a Carletto desde que es entrenador del Madrid es lo mucho que le cuesta, habitualmente, darle bola a chavales de la cantera. Su respeto a los galones del vestuario es absoluto y no busca medallas innecesarias por hacer jugar a canteranos en los que no cree o a los que no ve futuro en el primer equipo blanco. Por eso cuando le está dando minutos de calidad a Nico Paz es porque está plenamente convencido de que el chico ha llegado para quedarse. Su maniobra en el gol es de futbolista hecho, tocado por la varita de la clase y con fe ilimitada en sus posibilidades. El grupo celebró el tanto a lo grande porque los compañeros le ven entrenar todos los días y saben que es miembro de la primera plantilla de pleno derecho.

La cantera tiene que estar preparada física y mentalmente para aprovechar momentos de dificultad en el primer equipo y Nico Paz es un ejemplo perfecto. Que físicamente es muy fuerte y técnicamente muy bueno se sabía desde hacía mucho tiempo, pero luego hay que salir al ruedo y que la camiseta no te quede grande, porque el Madrid no suele dar segundas oportunidades. Nico se está agarrando con fuerza y calidad a la oportunidad de su vida. Se recuperarán lesionados y vendrán momentos de menos protagonismo, pero Ancelotti ya sabe que tiene un soldado más con el que contar en cualquier circunstancia y ante cualquier rival.

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