McLaren avanza a medias

La escudería McLaren, una histórica de la Fórmula 1, afronta el GP de Singapur como líder del Mundial de constructores, una categoría que no encabezaba desde 2014 y que no conquista desde 1998. Todo apunta a que en esta edición puede desquitarse, porque el Red Bull ya no es lo que era y el Ferrari sigue empecinado en la irregularidad. A falta de siete citas, los bólidos naranjas parecen lanzados al título después de consumar el ‘sorpasso’ hace una semana en Azerbaiyán. La remontada colectiva, sin embargo, no avanza al mismo ritmo que la individual. Lando Norris volverá a partir desde la pole por quinta vez esta temporada, pero ser el más rápido el sábado no equivale a un dominio en la carrera del domingo, que sólo ha ganado dos veces. Y hay que resaltar ese ‘sólo’, porque ya ha perdido varias oportunidades más. Su coche es evidentemente mejor que el actual Red Bull, pero no termina de hacer daño al campeón.

De hecho, en los últimos grandes premios se ha mostrado más incisivo su compañero Oscar Piastri, que progresa con pasos de gigante. El australiano ha vencido en dos de las últimas cinco citas y ha terminado segundo en otras dos. Piastri llama con fuerza a la puerta del Mundial, que se mostrará más abierta el año próximo. En este 2024, quien todavía tiene esperanzas realistas es Norris, que se encuentra a 59 puntos de Max Verstappen cuando todavía restan 206 en juego. Singapur se presenta como otra buena ocasión de pegarle una dentellada al liderato del holandés, pero el triple campeón mundial se rebela ante su gris situación. Mientras Lando completaba la pole sobrado por la superioridad de su monoplaza, Max exprimía su tremenda clase para acabar segundo. Donde ya no llega su coche, llega el tremendo piloto. Que es justo lo contrario de lo que le ocurre a Norris.