Mbappé descorcha el champán

Era cuestión de tiempo y se veía venir. Mbappé estaba yendo a más en lo futbolístico en cada partido y solo estaba faltando la eficacia para trasladar en números parte de lo mucho que estaba generando al frente del ataque blanco. Con un jugador de esta dimensión no puede haber dudas. Su condición física ya está cerca de su mejor versión y sus jugadas ya empiezan a ser las del Kylian que hemos visto durante su carrera. Creo que su adaptación va por buen camino, al igual que en las primeras jornadas los compañeros aún no le buscaban, le miraban o entendían sus movimientos lo suficiente, ahora las conexiones con sus compañeros del ataque son más fluidas y futbolistas como Vinicius o Bellingham empiezan a generar pequeñas sociedades con el francés. El gol es de los que está al alcance de muy pocos delanteros en el mundo. Sobre todo el último regate en el área, con un cambio de dirección a velocidad supersónica, para definir después buscando el contrapié del portero. Esta acción le aportará la confianza necesaria para aumentar esa eficacia que estaba faltando y que llevará el rendimiento del astro francés al lugar que corresponde por sus extraordinarias condiciones.