La última clásica de dos clásicos

El Giro de Lombardía es conocido como La Clásica de las hojas muertas, por su ubicación otoñal en el calendario, tradicionalmente en el mes de octubre. Junto a las hojas de los árboles, también cae el telón de la temporada ciclista con la celebración del último Monumento. Es un día de despedidas. Algunas, definitivas. Este año 2022 también caen dos clásicos en la última clásica: Alejandro Valverde y Vincenzo Nibali. Es el adiós de dos grandes del deporte. Dos históricos. Hay una foto maravillosa de La Vuelta que define el momento que se vivirá hoy en Lombardía. En ella se ve al pelotón formando un pasillo mientras aplauden al español y al italiano, a Balaverde y al Tiburón del Estrecho, que ruedan entre ellos. Es el tributo de los compañeros a dos campeones que se marchan con un palmarés excelso, todavía competitivos con 42 y 37 años, respectivamente. Valverde echa el candado con 133 victorias en su palmarés, entre ellas el Mundial, la Vuelta a España y cuatro veces la Lieja. Nibali es uno de los únicos siete corredores que han ganado las tres grandes: Tour, Giro y Vuelta.

Hoy dicen adiós en Lombardía, una clásica que Nibali dominó en 2015 y 2017 y que Valverde acarició tres veces en la segunda plaza. Conociendo a los dos, seguro que intentarán ganarla. No se sorprendan si lo hacen. Ambos se despiden al máximo nivel. Especialmente Alejandro, que ha firmado un segundo puesto en la Copa Agostoni, un tercero en los Tres Valles Varesinos y un cuarto en el Giro de Emilia, en sus tres últimas carreras, antes de poner el broche lombardo. Esa es la mejor manera de rubricar el final: por decisión propia y en lo más alto. Alberto Contador se marchó al día siguiente de coronarse en el Angliru. Así deja mejor sabor. España pierde a su último gran campeón, seguramente también el más polivante. Un corredor irrepetible que dispara su última bala… mientras caen las hojas.