La ‘Moto’ pone un cierre de oro

Los electores del Atleta Español del Año van a tener esta temporada una decisión complicada. Sobre todo entre dos nombres, entre dos triunfadores de estos Europeos de Múnich, que también tuvieron otros dos momentos álgidos en el presente curso. Me refiero, obviamente, a Asier Martínez y Mariano García. Sin olvidarme tampoco de Mohamed Katir. El vallista puede presumir de su espectacular oro continental en 110, por ¡una milésima! sobre Pascal Martinot-Lagarde; de un grandioso bronce mundial en Eugene, y de una alucinante progresión a sus 22 años. El mediofondista de 24, por su parte, se proclamó campeón del mundo de 800 en marzo, aunque en la versión indoor, y se ha colgado la misma medalla europea al aire libre ante un rival de categoría, Jake Wightman, reciente campeón mundial en Oregón en 1.500, a quien batió en un final agónico. A Katir quizá le ha faltado la guinda del oro para optar a ese trono, pero en su descargo hay que recordar que su bronce mundial en 1.500 y su plata continental en 5.000 tuvieron por el camino a Jakob Ingebrigtsen.

La ‘Moto’ puso un cierre sublime a la actuación general de la Selección, en una de las pruebas más prestigiosas del atletismo, para aupar a España al tercer puesto final del medallero con un total de diez, cuatro de ellas de oro, que son las que realmente suman. Más allá de los podios, el rendimiento conjunto del equipo deja un buen regusto, que incluso podría haber tenido un sabor más dulce si se hubiera materializado alguno de los siete cuartos puestos que se han acumulado en Múnich durante estos días, el último de ellos en el 4x100 femenino que clausuró los Europeos. Las medallas de chocolate no lucen en la tabla, pero dan brillo al comportamiento colectivo. Como escribimos en la víspera, a los Campeonatos no hay que ir por ir, hay que ir a competir. Y España lo ha hecho.